Quantcast
Channel: EL ESPECTADOR venezolano
Viewing all 1437 articles
Browse latest View live

Negret monumental en Valencia

$
0
0
Pieza de Negret para admirar.

Una exposiciónen homenaje al escultor colombiano Edgar Negret (1920-2012)se inauguró recientementecon el título Negret monumental, en el Consulado de Colombia en Valencia, Venezuela, a cargo del cónsul René A. Duarte G., bajo la coordinación de la Fundación Grupo Valdés, con la curaduría de Vanessa Valdés y María Granadillo, y la participación especial de la investigadora y crítico de arte Susana Benko, en el marco de la conmemoración de los 208 años de la independencia de Colombia que se celebra cada 20 de julio.
La muestra ofrece un panorama de la escultura monumental contemporánea a través de ladocumentación relativa a la obra a escala urbana más grande en la producción de Edgar Negret, Horizonte. Paisaje  Agustiniano, ubicada en la ciudad de Valencia, junto a algunas piezas representativas, maquetas, planos y fotografías de las obras de diez artistas venezolanos que han realizado esculturas a escala urbana en diversas regiones del país, como son Alberto Cavalieri,Nidia Del Moral, Marcastillo, Rafael Martínez, Carlos Medina, Luis Millé, J. J. Moros, Juvenal Ravelo, Sydia Reyes y Fabiola Sequera.
“A todos los une la geometría y la abstracción como solución formal tanto en obras en pequeño y mediano formato como en aquellas realizadas a escala urbana (…) La intención central es ampliar el conocimiento y la reflexión acerca de la relación arte y contexto urbano. De este modo se busca fomentar en el ciudadano –quien finalmente es quien transita y hace suyo su entorno– el valor de nuestro patrimonio y con ello su sentido de pertenencia”, según escribe Susana Benko en el texto que acompaña la muestra.
. Considerado como el Maestro de la Escultura en Colombia y pionero del arte latinoamericano contemporáneo, Edgar Negret desarrolló a lo largo de su trayectoria una importante obra, reconocida a nivel mundial. “Su presencia en Venezuela fue tan constante, tan generosa, que en 1985 el crítico de arte Roberto Guevara lo recordó diciendo: ‘Negret de América también es nuestro’. Tan nuestro que en 1998 fue condecorado en Caracas con la Orden Andrés Bello, precisamente porque este artista quiso que parte de su obra más significativa se quedara en Venezuela”, afirma Benko.
 Además de la obra Horizonte. Paisaje  Agustiniano del maestro Edgar Negret, se incluyen en el proyecto expositivo las obras Fragmento de lluvia para Caracasde Carlos Medina; Estructural en Torsiónde Luis Millé; Apeliotes, de Alberto Cavalieri; Territorio Mineralde Nidia Del Moral; Módulos cromáticos, de Juvenal RaveloParque virtualde J.J. Moros; La hora de la pazde Marcastillo Flor Sideralde Rafael MartínezMultiversos Ide Sydia Reyes; y Guardiana de las aguas, de Fabiola Sequera.
La exposición Negret monumental podrá ser visitada hasta el 7 de septiembre en la sede del Consulado de Colombia en Valencia, Venezuela, ubicada en la Avenida Bolívar Norte, local 108-118, Sector San José. El horario es de lunes a viernes de 9 am a 2 pm. La entrada es libre.
Las visitas guiadas se pueden coordinar a través del correo: fundaciongrupovaldes@gmail.com








Entregan Premio de Dramaturgia Apacuana a Pablo García Gámez

$
0
0
El merecido galardón para el caraqueño Pablo.
La Compañía Nacional de Teatro, actualmente comanda por el director Carlos Arroyo, hará entrega de un reconocimiento al dramaturgo venezolano Pablo García Gámez, ganador del Premio Apacuana de Dramaturgia Nacional 2017 con la obra Oscuro, de noche. El evento tendrá lugar en la sala expositiva I, de la Galería de Arte Nacional, este viernes 3 de agosto de 2018, a las 3:00 pm.
La obra ganadora de la pasada edición del prestigioso premio de dramaturgia nacional parte de un hecho de violencia, según reseña el autor, con el que una familia es casi destruida y sus miembros tratan de rescatarla. Kenny, hijo de Zenobia y Cristóbal, está involucrado como víctima en un hecho violento con una moto. Hay testigos que con sus versiones y opiniones, traslucen sus prejuicios y su ideología. En la obra mientras la familia trata de reconstruirse a la gente del entorno parece no importarle lo que ocurre con ese grupo, no le interesa lo que ocurrió: “¿Pero qué pasa si nos unimos y comenzamos a tener actitudes cívicas?”, se pregunta el autor. En la actualidad, la Compañía Nacional de Teatro prepara el montaje de este importante texto teatral próximo estrenarse bajo la dirección de Arroyo.
Pablo García Gámez, acual profesor en el City College, Brooklyn College, de la Universidad de la Ciudad de Nueva York –CUNY; comparte su tiempo entre la escritura teatral y la dedicación a la investigación y elaboración de un proyecto de docencia teatral universitaria, sobre el teatro hispano en Nueva York. Arribó al país para llevar a cabo la tercera edición de su taller Dramaturgia del Acuyá que finaliza el día del evento a las 4:00 pm con el unipersonal Taller de actuación Espina, interpretado por la actriz Annie Ferrer, dirigida por Ysrael Serrano.
En su curtida y excelente formación teatral, este autor venezolano cuenta con cursos y talleres de dramaturgia, en Venezuela: con Juan Carlos Gené, Oswaldo Dragún,Abilio Estévez, Rodolfo Santana, Luis Dorrego, Hugo Salcedo; y recientemente con Antonio César Morón, dramaturgo, poeta y ensayista español, creador del concepto de dramaturgia cuántica, de gran aceptación en el ámbito académico y escénico de Nueva York. Sin dejar de mencionar su paso, en los años ochenta, por el Círculo de Críticos de Teatro de Venezuela (Critven), junto a Sonia Murillo, Rubén Monasterios, Leonardo Azpárren Giménez, Eduardo Robles Piquer, (RAS); José Antonio Rial, Helena Sassone, Carlos Herrera y E.A. Antonio Moreno Uribe. Además, en su carrera dramatúrgica cuenta con una cantidad de piezas teatrales premiadas.


Cinco esquinas caraqueñas se hacen teatro

$
0
0

El teatro venezolano se reinventa fuera de las salas para hacer vida en las comunidades y es por eso que varios colectivos enteros de nuevos y veteranos artistas han tenido nuevas experiencias gracias la espontaneidad de las calles y las plazas públicas, al mismo tiempo que descubren un semillero de talentos que demuestra que el teatro no es oficio sólo para profesionales. Nace siempre de las entrañas del pueblo ansioso de ser oído y visto por sus comunidades.
En Caracas, como lo ha dicho el artista Alberto Ravara, el fenómeno del teatro comunitario se volvió más frecuente desde 2002, en pleno escenario del golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez, “un momento delicado para el país por el que un gran grupo de artistas decidimos hacer del teatro un mensaje para la paz. Fuimos a las comunidades para hacer funciones y aunque en algunas zonas no nos querían recibir, pronto la gente comenzó a pedirnos más y más obras. En ese momento entendimos que la gente necesitaba del teatro”, declara el artista de nacionalidad argentina, quien tiene no menos de 40 años viviendo en este país. Nace así, sin pretender hacer “historicismo estético”, el teatro comunitario de Caracas, más de este siglo XXI por supuesto.
 “Esas comunidades teatreras se definen por su alegría, por lo expresivas que son, tan ricas en matices y con unas ganas muy grandes de participar. Hemos descubierto que hay mucho potencial en las calles y nosotros como artistas debemos apoyar a la gente, estimularla, brindar las herramientas para que los nuevos grupos aprendan de técnicas teatrales, sin ejercer sobre ellas una enseñanza dominante. Las comunidades deben usar el teatro para retratarse a sí mismas”, apunta Ravara.
El teatro, pues, viene a ser  el instrumento ideal para unir a la gente, para luchar contra la inseguridad, contra el pesimismo, contra cualquier problema que nos quiera afectar, podríamos sinterizar lo que predica y muestran Ravara y otros teatreros como él, creyentes en los poderes mágicos del pueblo., quienes “cuentan historias locales tal como lo hacen las comunidades, con un potencial metodológico, estético y de experimentación que puede competir perfectamente con cualquier grupo profesional”,
Este año, el teatro comunitario se hizo  nuevamente espectáculo público con el montaje de la obra Las esquinas de Caracas, una pieza de creación colectiva dirigida por José Luis León, la cual se presentó para festejar  además los 451 años de la fundación de Caracas (25 de julio) por un selecto grupo de habitantes de las parroquias de Santa Teresa, Catedral, Candelaria, Altagracia, San Agustín y San Juan, con sendas presentaciones del taller comunitario “Las esquinas de Caracas”, los días 28 y 28 de julio y está programado  de nuevo  durante los días 3 y 4 de agosto, a las 4 de la tarde, en la instalaciones del Teatro Nacional, donde participan no menos de 40 personas.
Esta muestra selecta de teatro comunitario, que fue muy aplaudida por numerosos espectadores, se logró gracias a la iniciativa de la agrupación Actividades Alternativas, en coproducción con la Compañía Nacional de Teatro, y además este año fue posible gracias al trabajo en conjunto con la Red de Teatro y Circo, la Escuela Nacional de Artes Escénicas César Rengifo, la Escuela de Arte Escénico Juana Sujo y la organización teatral Igual a Uno.
El director León afirmó que “con este montaje llegamos a crear un espacio para el encuentro, donde se investigaron y exploraron las historias, costumbres y tradiciones de las esquinas de Caracas, donde que lo más admirable de este proyecto es la retroalimentación gracias a la convivencia que se ha creado entre los artista y las comunidades. El resultado de esta actividad teatral es una familia, con todos sus elementos y matices. Las comunidades nos cuentan sus historias y los artistas les brindamos las herramientas para escenificarlas”.
Subrayo León que hacia finales del siglo XVIII, las calles y esquinas de Caracas no poseían nombres, sólo se conocían aquellas que tenían como referencia una iglesia cercana, alguna casa de personas importantes, o que hacían alusión a anécdotas en el cruce de sus calles. Y de ahí nace una singular topografía urbana, que ha sido reseñada por varios escritores, especialmente por Carmen Clemente Travieso, en su libro Las esquinas de Caracas, editado hacia 1956.
SOLO CINCO POR AHORA
Para este espectáculo se eligieron las esquinas de Ánimas, Cristo al revés, la Torre, el Muerto y Miguelacho. Gracias a este montaje, los interpretes revelaron como cuando la oscuridad caía sobre un sitio siniestro y además infundía terror al vecindario, se podía escuchar un coro de voces fúnebres, hasta que unos curiosos salieron a ver de qué se trataba y se llevaron tremenda sorpresa: eran unas sombras con túnicas blancas que llevaban hachas encendidas y que solían identificarse como “Ánimas del Purgatorio”. Y se llamó desde entonces la esquina de Ánimas
Sobre la esquina de Cristo al revés se comenta que en ese sector vivía un zapatero quien cosía tan artísticamente las zapatillas de tacón Luis XV como las botas de los soldados. Luego que un colega se instaló a pocas casas, el primer zapatero colocó de cabeza a un Cristo para presionarlo a que le alejara al competidor, cuenta la leyenda.
La catedral de Caracas (1666) no tuvo una torre para sus campanas sino unos cien años después de su erección, porque las campanas colgaban de unos horcones de madera que servían de campanil. El reloj de la torre fue puesto en su sitio, durante la administración del presidente Juan Pablo Rojas Paúl. Seis relojes le precedieron en la Catedral; mientras más antiguos más modestos e imperfectos. Desde entonces se le conoce como la esquina de Torre.
Con respecto a la esquina El muerto,  cuenta también  la periodista  Travieso  que durante la sórdida Guerra Federal llegaron a la esquina que hoy se conoce como El Muerto, para recoger los cuerpos de algunos combatientes y al ser llevado en camilla  uno se sentó de repente y dijo: “No me lleven a enterrar, porque estoy vivo”. El protagonista de la historia, evidentemente, no había muerto. Había caído desmayado producto de la herida y luego recobró el conocimiento. Así, la historia de esta esquina que no es la de cualquier muerto que salía de noche a asustar, sino la de un vivo que todos creían muerto, o la de un muerto que revivió. Excelente reseña además de la Travieso.
Y la esquina de Miguelacho se llama así porque ahí funcionaba na pulpería de un tal Ño Miguelacho, todo un personaje defensor de los niños y los desamparados, quienes lo salvaron de la cárcel porque la comunidad protestó ante las autoridades de turno.
Los actores relataron, pues, cada una de las historias de esas esquinas y alternaban sus apariciones con danzones, merengues y boleros, más del siglo XX, como Caracas vieja Rayito de luna, Epa Isidoro, El yerbatero y El madrigal, para animar así aquella fiesta que tenía un ritmo aceptable, bien iluminado y con vestuarios de época. Unos gratos 60 minutos de un cuento dignamente echado.
En síntesis, Las esquinas de Caracas merecen seguirse exhibiendo, con más esquinas. Hay que recordar, como dicen los reseñadores del libro de Travieso, que los curiosos nombres de las esquinas del  centro de Caracas  no fue obra de las autoridades  municipales sino del mismo pueblo, quien necesitaba de una orientación en una ciudad  donde casi toda las casas se parecían.

El juego de Mariela Romero continúa

$
0
0
El teatro copía a la vida,como diría Mariela Romero.
Nunca dejaremos de reseñar que  la hiperkinética y pequeña hija de Rosalía Romero, jamás sospechó como su obra El juego, premiada en un concurso del Ministerio de Justicia, del año 1976, tendría larga y positiva vida en los escenarios venezolanos y del mundo. Nos referimos a Mariela (Ibarra) Romero, nacida en Caracas hacia 1949, quien con experiencia y talento logró crear un estilo que la caracteriza, al reflejar, en buena parte de sus argumentos teatrales, relaciones más que temas y personajes más que situaciones.
Y citamos a Mariela Romero porque ha permitido que el Taller Nacional de Teatro de la Fundación Rajatabla (Carlos Gimenez, 28 de febrero de 1971) como parte de su promoción XXVIII montará El juego, precisamente una de sus piezas más emblemáticas, capaz de llevar al público a una especie de recorrido por una montaña rusa de emociones. Y mostrar así, bajo la dirección general de Jennifer Morales, como Fabiola Ferrer (Ana II) y María Teresa Molina (Ana I) logran encarnar a los personajes de las pequeñas Anas, a quienes un despiadado adulto mayor las tiene encerradas en un asqueroso potrero. Otra vez más: la explotación de los seres humanos por la acción de un desalmado se muestra desde un escenario como para que nadie lo olvide.
Sin reconocerse a sí mismas, Ana 1 y Anna II viven, en cuerpos y almas, inmersas en la indigencia; atormentadas por la miseria, el hambre y la explotación de un malvado hombre, sus mentes precoces luchan para sobrellevar la agonía de la cotidianidad con juegos que reflejan su día a día, especialmente cuando salen a las calles a trabajar para él. Dos esclavas en el mundo de la posmodernidad en una ciudad imaginaria, pero que tiene varios perfiles semejantes a Caracas. Este teatro mantiene su vigencia. Se trata de un melodrama sobre un dueto de indigentes que luchan para sobrevivir en medio de una sociedad que los excluye o persigue. Ahí se materializan a las desposeídas Ana I y Ana II ¡El teatro copia crudas y jamás superadas realidades!
Este montaje, muy cuidado y limitado en su planta de movimientos por el espacio escénico, y apuntalado además en la dirección de actores (Andreina Bustamante), demuestra un intenso y laborioso trabajo de la directora Jennifer hasta obtener un producto de calidad artística, conseguido con mínimos recursos. Es notable la aparición de estas jóvenes comediantes, María y Fabiola, quienes demuestran ya su sólido proceso de capacitación, adelantado en diferentes instituciones caraqueñas y especialmente en Rajatabla, quienes ahora saldrán al mercado de trabajo artístico,porque para ello han estudiado y trabajado.
Hay que recordar que Mariela Romero (su nombre artístico) inició su carrera artística como actriz en el grupo Bohemio, tras egresar de la Escuela de Arte Dramático del Ateneo de Caracas. Hoy por hoy es una dramaturga célebre y además afamada escritora de telenovelas. También ha realizado numerosas adaptaciones y versiones de los clásicos, lo cual le ha permitido escudriñar los secretos de la estructura dramática. Pero es más conocida internacionalmente en estos tiempos por sus telenovelas, unas 50, entre adaptaciones y plausibles creaciones.
El juego, estrenada el 23 de julio de 1976 por el director Armando Gota para el grupo Rajatabla, con la participación de la autora encarnando a una de las protagonistas de esa trama- está nuevamente en la cartelera caraqueña, específicamente en la sala de la Fundación Rajatabla para recontar la historia de dos féminas, y quienes además comparten la miseria y la represión impuesta por una figura masculina que las obliga a trabajar para él. La acción dramática se desarrolla en una habitación arruinada y donde la pareja se entrega a un juego de poderes para matar el tedio en que viven y mientras esperan al cruel amo que vendrá a regañarlas y abusar de ellas, crean situaciones, las actúan, y llegan hasta pensar que son reales. Las Anas hacen una especie de teatro dentro del mismo teatro, recurso que les permite revelar, a través de diferentes caracterizaciones, la intensidad de la relación de dependencia entre ellas. Juzgamos que las actuaciones están en el punto exacto de esa verdad que debe brotar siempre de un escenario donde hay un texto perfecto y correctamente escenificado.
Una vez más, Mariela Romero reitera como la debilidad del oprimido radica en ser opresor de otro tan dominado como él. El juego del poder siempre tiene un perdedor y en El juego también. Debutó como autora teatral hacia 1967 con Algo alrededor del espejo, pero es durante 1976 cuando irrumpe con El juego. Tiene otros textos como Este mudo circoEl juego de los vampirosEl cáncer es curable no lo malgasteEl vendedor y Esperando al italiano (dos de sus éxitos de taquilla), además de El regreso del Rey Lear. Pero en todas esas piezas reitera las constantes que la caracterizan: el mundo femenino en lucha contra complejos contextos machistas y los conflictos socioeconómicos donde están envueltas sus heroínas o antiheroínas. Tiene esas banderas y no las ha quemado.
La dramaturga Mariela Romero lleva más de dos décadas en Florida, Estados Unidos de América, y nunca ha dejado de escribir telenovelas y comedias exitosas para abrillantar su nombre artístico y estar a tono con la estirpe de su inolvidable tío, el legendario músico Aldemaro Romero, nos contó que su teatro ha revivido en Miami.


Shakespeare para dos mil habitantes de Caracas

$
0
0
El teatro es vida y por eso no se puede detener.

  Medida por medida,  una de las obras  más personales  de William Shakespeare,  que  denuncia el abuso  sobre las mujeres, en una versión escénica de Federico Pacanins, dirigida por José Tomás Angola Heredia, se presentará  en seis únicas  funciones,  los días  18, 19, 25 y 26 de agosto,  1 y 2 de septiembre, a las 11  am,  en la Sala de Teatro de la Asociación Cultural Humboldt, ubicada en la avenida Los Próceres, cruce con Avenida Juan Germán Roscio de San Bernardino.Se espera que los teatromaníacos caraqueños desafíen todos los obstáculos posibles y acudan a las seis funciones que se presentaran en el exquisito teatro de San Bernardino, gracias al maravilloso equipo humano que ha organizado y dirigido José Tomás Angola Heredia, quien aquí cuenta porque espera que Caracas le responda.
¿Por qué Shakespeare? ¿Qué hizo con la versión en español y acaso la venezolanizó?
Es necesario volver de cuando en cuando la vista hacia los clásicos para entender nuestra esencia. La obra de Shakespeare mantiene una vigencia incuestionable. Sus textos desentrañan la condición humana con tanta poesía y honestidad que nos revelan lo que ha sido constante en nuestro espíritu a través de los tiempos. En Venezuela hoy en día solemos hacer pocos clásicos, y cuando se representan casi siempre son adaptaciones contemporáneas, o versiones muy compactadas. Eso se debe a tres razones: la primera es que el espectador venezolano ha perdido la costumbre de presenciar obras de cinco actos y tres horas. La otra es que nuestras escuelas no están preparando talentos para el teatro clásico, ni en la actuación ni en la dirección. El teatro del siglo de oro, las obras en verso o del teatro isabelino tienen sus demandas, necesidades y exigencias cuando se quieren acometer tal y como fueron escritas. No se trata tampoco de hacer un montaje arqueológico, pero el actor y el director que asumen Shakespeare deben tener una capacidad de lectura, comprensión e interpretación que no se les solicita normalmente para textos modernos. De allí lo difícil de reunir un elenco preparado para hacerlo en su forma original. Finalmente producir las obras de Shakespeare, si se quiere hacer tal como se concibieron, ameritan de una importante inversión económica que no siempre se recuperará. Hablamos de elencos muy grandes, con largos procesos de ensayo (en nuestro caso 4 meses). Diseños y realización de vestuarios, escenografía, iluminación, utilería. Tenemos por ejemplo en esta producción látigos antiguos que debimos mandar a fabricar, espadas y estoques, botas de cuero, todos los guantes, etc. Es de verdad un esfuerzo mayúsculo financiero, y estando Venezuela como lo está, viviendo su peor crisis histórica, muy pocos están dispuestos a lanzarse en esta cruzada por el teatro clásico de arte.
La decisión de hacer Medida por medida fue de nuestro productor ejecutivo y autor de la versión escénica, Federico Pacanins. Federico es un hombre no solo de la música y el teatro, lo es del arte integralmente. Por su formación académica, es abogado, le interesaba sobre manera el tema de la justicia. En Medida por medida el meollo dramático versa sobre la imposibilidad de que la justicia humana pueda alcanzar eso que llamamos la verdad. La hipocresía, la falsedad, en cuanto hablamos de las pasiones y la moral, nos hace muy débiles para juzgar en otros, delitos a los que somos propensos por nuestra esencia carnal. Esta obra le apasionaba desde hacía años, tanto que enfrentó su versión escénica manteniendo un gran rigor. La obra sigue teniendo sus cinco actos, dura 2 horas y media, con un intermedio de 10 minutos. Pero atendiendo muy de cerca la lectura crítica que de ella hizo el poeta W. H. Auden, propone unos afeites menores y de estilo, en donde suprime ciertas reiteraciones de trama, muy de Shakespeare para que los espectadores de su época no se perdieran, y esto agiliza el ritmo sin sacrificar trama. También sirvió de catalizador entre las muchas traducciones de que se valió. Como sabemos las traducciones de Shakespeare son en sí mismas nuevas obras. Es imposible mantener y recrear en español la belleza plástica y la melodía de los versos yámbicos en inglés. Entonces Pacanins, afinando su oído de melómano ensambló las mejores traducciones y las más cercanas al espíritu original de la obra, modulándolas y atemperándolas a nuestro presente.  Esto no significa, sin embargo, que los diálogos se hayan "venezolanizados", simplemente plantea una lectura más casual y comprensible, sin desantender la poesía y la musicalidad. Creo que Federico logró un trabajo muy exacto a lo que Shakespeare originalmente escribió.
 ¿Por qué tan pocas funciones?
Tendremos 6 funciones en el teatro de la Asociación Humboldt en San Bernardino. El público venezolano, al no tener ese tipo de oferta cultural en los últimos años, perdió la costumbre de ver y disfrutar teatro clásico. Así que su cantidad mermó. Eso pasó también con la ópera. Luego de haber sido un país con una estupenda y variada programación lírica, su reducción hizo que el auditorio se constriñera. Para ver teatro clásico (y ópera) hay que disponerse emocional e intelectualmente. Hay que resonar con la palabra y la acción dramática desde un tempo que ya no es el del vértigo actual. Con un aforo para 300 espectadores, esas seis funciones significarían casi 2.000 espectadores. Me llevaría una gratísima sorpresa si esas funciones se abarrotan. Eso hablaría de un público sediento de arte. De paso debo aclarar que aunque el teatro clásico tiene sus convenciones, el espectador no irá a ver una obra de museo. Hay ciertas licencias que nos hemos tomado en aras de darle colorido y fuerza al espectáculo. Por ejemplo, como es común en mis obras, la puesta incluye el manejo del mapping y el video de una manera diegética. Es decir, como parte del discurso. No se verá el video como efecto sino que su uso se mixtura con la luz teatral. A veces no sabremos si lo que vemos es un reflector o una proyección digital. Otro recurso que le da mucha fuerza a la puesta es el manejo de la música, con la presencia intermitente de un guitarrista/cantante, que en la vera tradicional del trovador, nos lleva sonoramente por emociones, espacios y situaciones.
La otra razón por la que tendremos solo 6 funciones es que al ser un espectáculo complejo en su montaje, la Sala de la Asociación Humboldt queda ese tiempo amarrada solo a nuestra producción. Es imposible entre semana levantar la escenografía para permitir otros eventos. Eso era algo muy común en otras épocas cuando agrupaciones como Rajatabla, Theja o el Nuevo Grupo hacían grandes despliegues escenográficos. El teatro, como es lo lógico, quedaba exclusivamente para ese montaje. Hoy por la imposición grosera de la taquilla, se exigen escenografías pret-a-porte, móviles, de poquísimos elemento en casi todas las salas para que ocurran tres y cuatro obras el mismo día. Eso pude funcionar con cierto tipo de teatro, pero no para nosotros. La Humboldt realmente está abogando por un teatro de arte y de calidad, por eso dispone de esas tres semanas para esta aventura. Los otros días ya tienen actividades programadas.
¿Costos de producción?
No manejo la parte ejecutiva de la producción. La cabeza ahí es Federico Pacanins. Pero con él establecí un diálogo de artista a artista, y Federico ha comprendido las necesidades para ciertas inversiones que pueden lucir grandes ahora, pero que sin embargo redundan en calidad. Una de esas inversiones en la que no se escatimó fue en el elenco. Logramos reunir un grupo de actores de primer orden. Artistas talentosos, entrenados en teatro clásico, con recursos técnicos enormes. Me siento muy orgulloso de dirigirlos. Nombres que les serán muy conocidos porque representan lo mejor de nuestro teatro: Antonio Delli, Sandra Yajure, Gerardo Soto, Ignacio Marchena, Salvador Pérez Castro, José Antonio Barrios, Andrea Miartus, Brixio Bell, Zair Mora, Edgar Sibada, Federico Moleiro, Rafael Gorrochotegui, Silvia de Abreu, Andrés Sierra y Juan Carlos Grisal, gran músico en el rol del trovador.
Con ellos un equipo técnico al que solo puedo agradecerles el empeño y la dedicación. El vestuario es obra de la talentosa Fabiola Neri con la gran ayuda de Elizabeth Yrausquín, la iluminación es de un colaborador habitual y estupendo profesional. Manuel Troconis, el diseño y la realización escenográfica de un maestro de maestros, Freddy Belisario, Multimedia y mapping uno de los mejores en su campo en Venezuela, José Martínez. Todos bajo la batuta de un gran productor, un señor del teatro, con 40 años en el medio, Carlos SIlva.
También debo agradecer a la Asociación Humboldt quienes apostando con gran vocación por la cultura en Venezuela, coproducen esta obra, y nos permiten que la entrada tenga un costo muy solidario. Menos que un café servido en barra. Esto para que la entrada no sea un obstáculo para los espectadores que están padeciendo la brutal situación que todos sufrimos.
¿Por qué no monta sus textos?
Este año, dadas las dificultades económicas, en mi grupo, La Máquina Teatro, decidimos enfocarnos en una sola producción que resultó un gran éxito de crítica, "Ningún hombre es una isla". Es una pieza de mi autoría que ya tuvo su estreno y primera temporada a principios de año, y que regresa con un remontaje en septiembre, también en la Sala Humboldt. Es una obra compleja técnicamente, demandante en lo actoral, y extenuante en la producción. Haremos una nueva temporada corta pues allí asumo de actor, director y autor. Es una tarea muy ambiciosa para la que debo prepararme anímica y físicamente. Pero ha sido una experiencia muy reconfortante. Lo que había presentado antes en Venezuela de mi autoría habían sido los monólogos del ciclo "Matria" que hice en el Ateneo de Caracas con un elenco de lujo: Aura Rivas, Catherina Cardozo, Claudia Nieto y Neo Rodríguez. Todo lo demás lo había estrenado en Estados Unidos, de la mano de amigos venezolanos allá como Luis Carreño y Otto Rodríguez. Rebeca Alemán mostró interés en llevar a Chicago Ningún hombre es una isla  en inglés. Estamos aún en el asunto de la traducción. Soy quizá demasiado crítico conmigo mismo. Mis procesos creativos son lentos, muy pensados, y me gusta tener el control y manejar cada detalle. Es posible que no sea la mejor manera de llevar en Venezuela el tema de la creación, donde todo es tan acelerado e inmediato. Pero no tengo apuro. Trabajando así en 27 años de teatro profesional he logrado estrenar 20 obras mías en Venezuela, Estados Unidos, España y México, publicar varios volúmenes de teatro en Venezuela y España, ganar uno que otro premio, y recibir elogiosas y también duras críticas. Andamos, andamos y eso es lo que cuenta.
¿Qué estrategias tienes para la promoción teniendo en cuenta los tiempos y los horarios? 
Obviamente la cartelera teatral en Venezuela es un asunto muy enrevesado y complicado. Las funciones más tarde empiezan a las 7 de la noche. La gente le da miedo, con razón, circular en la calle después de las 8 de la noche. Por ello para una obra con esta duración hemos decidido experimentar una opción novedosa. Entendiendo un poco al público de la música sinfónica, habitual de conciertos de casi dos horas, haremos funciones solo los sábados y domingos a las 11 am. A mí en lo personal el horario me encanta. Tus sentidos están alertas pero no tienes el apuro de la hora por la inseguridad, ni la preocupación de la noche. Es fin de semana, buen momento para dedicarlo al esparcimiento pero también a la reflexión y la emoción. Shakespeare no es teatro solo para distraer. Cumple con esa responsabilidad, pero no es la principal. El arte entretiene sí, pero nos hace pensar y sentir aún después de terminada la función. Y nos debe transformar. Allí quizá esté la única forma de diferenciar lo que es entretenimiento y lo que es arte. Si al salir de una obra de teatro usted es distinto, tiene otra visión o es mejor, acaba de estar frente a una obra de arte.
Con la promoción también estamos viviendo un tiempo de cambio radical. Como el gobierno desnaturalizó a los medios de comunicación masivos, los espacios para la cultura se volvieron las esquinas y sótanos de esos medios. Iremos a los lugares donde aún resisten los valientes creyentes en el arte, pero estamos también desplegando campañas por medios digitales y redes sociales buscando alcanzar y motivar a los espectadores.
Los espacios de la Asociación Cultural Humboldt en San Bernardino, al lado del Ávila, son magníficos. Una de las mejores salas con que cuenta Caracas, obra del genio arquitectónico de Dirk Bornhorst . Estacionamiento, cafetín, vigilancia. No ir es perder una oportunidad de ser feliz. 

Cuando la razón se blinda para divertir y enseñar

$
0
0
El humor es la clave de este espectáculo.

La razón blindada es sin duda una de las obras del teatro latinoamericano contemporáneo más conmovedoras del argentino Arístides Vargas. Es un poema al poder liberador de la imaginación, como forma de resistencia a la represión. La obra está basada en la vida real del hermano del autor quien fuera víctima durante la dictadura argentina, y en El Quijote de Cervantes, y La verdadera historia de Sancho Panza de Franz Kafka.
Una historia donde nos cuenta la supervivencia de dos presos políticos: De la Mancha y Panza, quienes se encuentran a las tres de la tarde de cada domingo para tratar de representar una historia que les permita “liberarse” a través de la imaginación, del encierro al cual fueron sometidos. Ellos sobreviven en el inframundo que representa la prisión a la cual fueron condenados injustamente. La pieza nos muestra a los personajes girando en el frenesí de la locura real o imaginaria donde la ficción y la realidad deben cohabitar para que la vida sea posible. Ya que la creación de un mundo paralelo al infierno diario hace posible la salvación.
En La razón blindada  veremos a unos seres humanos que fueron sometidos a un castigo brutal e injusto, y con la frágil pero imbatible fuerza de aquellos presos políticos, exiliados, rebeldes que conservan la ternura, la risa, y la pasión por jugar y crear- historias para alcanzar la libertad profunda; esa utopía que todos parecemos perseguir alguna vez.
De La Mancha personaje interpretado magistralmente por el primer actor Salomón Adames quien además celebra sus 40 años de carrera artística representando al hidalgo caballero. Un quijote que confunde cárceles con paraísos y desiertos, y que se exilia en la sinrazón, en ese extraño desorden que no hace mal a nadie pero que ayuda profundamente a vivir.
Panza encarnado por el actor y director Luis Bernal, quien representa a la perfección la dualidad entre el personaje literario y el creador de historias coexistentes en el.
Unos personajes muy expresivos y convincentes con el que ríes, lloras, te deleitas, sufres por ellos y con ellos hasta el final de la obra. Esta extraordinaria puesta en escena de Luis Bernal se caracteriza por su autenticidad en la dirección, las actuaciones y la escenografía. Con un tono, lúdico, algunas veces trágico y otras veces humorístico, que mantiene cautiva la atención del espectador de principio a fin.
Una obra tan importante en estos tiempos que vivimos donde se tocan temas como la libertad, la memoria y los derechos humanos. Temas que son aún materias pendientes de reflexión en nuestro atormentado país.
Producciones Con Los Pies en las Tablas apuesta a esta magistral pieza del teatro contemporánea latinoamericano, que cuenta con un equipo de profesionales del teatro como son: El destacado Primer actor Salomón Adames junto a Luis Bernal quienes interpretan los distintos personajes de la historia. Demis Gutiérrez en la asistencia de dirección, Irvin Coa en la asistencia de producción, Armando Zullo en la escenografía, Víctor Villavicencio en la iluminación, y la dirección general y puesta en escena de Luis Bernal.
La temporada se llevará a cabo desde el 18 hasta el 26 de agosto, los días sábados y domingos a las 4:00 pm. En el Centro Cultural Chacao, ubicado detrás del Centro Comercial Lido. Entradas por Ticketmundo.com y en las taquillas del teatro.


El teatro de Gerardo

$
0
0
GERARDO BLANCO LÓPEZ

No siempre los balances artísticos suelen ser gratos, pero algunos teatreros, de esos que jamás se mienten a sí mismos, al final de una temporada se sientan y sacan sus números para ver a cuantos espectadores llegaron o presenciaron sus eventos culturales. Siempre queda muy adentro de los corazones de esos artistas –son escasos-la satisfacción de haber cumplido su “objetivo principal” porque para eso trabajaron: sí fue la gente, a pesar de todos los obstáculos que hay para llegar a una sala teatral, además de los imponderables.
Escribimos esto porque estuvimos pendientes de las 27 funciones programadas de Noche de guardia, extraña obra pieza venezolana, producida por el grupo Bagazos, sobre la vejez, agravada con el deterioro físico de una enfermedad terminal,  y una solución, no muy católica, como diría mi profesor de religión, para salir de este mundo. En síntesis: una comedia patética donde se advierte sobre el inevitable colofón de los humanos, especialmente de los masculinos, que logran pasar el medio cupón, por lo menos, de vida útil.
Noche de guardia, pues, cumplió con su compromiso en El Espacio Alterno del Trasnocho Cultural y contabilizó 1.200 espectadores. Los comentarios, del público y de los exiguos críticos que aún quedan, son muy positivos, pululan, y seguramente continuarán cuando se haga la segunda temporada, posiblemente para el año próximo, además de un foro con la participación de público y especialistas.
Gerardo Blanco López, quien ha escrito y escenificado no menos de 19 obras, comenta que su Noche de guardia es un reclamo a lo injusto y terrible de la vejez, un canto a la amistad, una lucha por el derecho a decidir por nosotros, un recuento de lo vivido y la sorpresa al darnos cuenta que la vida siempre nos da motivos para sorprendernos. "Es mi forma de tratar de alejarme inútilmente de lo inevitable, un abrazo cálido a los viejos que nos ha tocado cuidar y que han sido un espejo, un recordatorio de lo próximo. Esta pieza forma parte de una trilogía sobre la ancianidad, que inicié con La cuadrilla (1996), la vejez en pareja; seguida con Nos vemos el miércoles (2017), la vejez a través de la visión femenina, y ahora Noche de guardia (2018), la ancianidad a través del prisma masculino”.
 Noche de guardia, comenta Blanco López, nace al igual que Nos vemos el miércoles de la experiencia vivida durante la gravedad de su madre, de las horas con ella durante su enfermedad y la necesidad de brindar un homenaje a nuestros viejos amados durante sus años dorados. “Esta reciente pieza, creo que es mucho más reflexiva, ahí la risa se entrelaza con la dura realidad de la vejez y la fatal enfermedad de uno de los cuatro amigos que se reúnen una noche para cuidar al afectado, y resulta sorpresiva y al mismo tiempo plantea una serie de dilemas que nos harán reír y reflexionar, esa por lo menos es mi intención y espero que así lo vea nuestra audiencia”.
Considera Blanco López que escribir es un ejercicio de intimidad fascinante, un descubrir imágenes que reclaman su autonomía, las cuales batallan por tener vida propia y con Noche de Guardia no fue la excepción, mucho de lo que hablan esos cuatro viejos, sus personajes protagonistas, tienen que ver con lo vivido, donde no hay nada que no sea común y cotidiano, pero a veces triste y doloroso como echar una mirada a un álbum de fotos viejas. “¿A quién no se le arruga el corazón al revisar las gráficas o las fotografias que nos atestiguan los tiempos vividos? El montaje resultó fascinante, intenso, con turbulencias y temores, como todos los montajes, pero reconfortante y de mucho crecimiento; trabajar con cuatro excelentes actores de gran experiencia, calidad humana y profesionalismo es muy enriquecedor, me siento honrado, un privilegio. Ahí estaban, dándole vida a mis personajes, comediantes como Alejandro Mata, Pedro Durán, Carlos Abbatemarco y Antonio Cuevas. El público, ese temible critico de las mil cabezas, pronunció su veredicto”. 
 Blanco López, que le da gracias a Dios permanentemente por haberle permitido hacer su carrera artística, “en especial a todos esos amigos; actores, técnicos, productores, patrocinantes, que han creído en mí, me han acompañado durante estos 39 años y me han enseñado a vivir el teatro, a entender que es una pasión, una hermosa locura, siempre desde esa casa cálida, que ha sido el grupo Bagazos. Hay que agradecer, dar gracias a tanta gente, mil y más nombres se vienen a mi mente. El último de los sueños logrados tienen su origen en la complicidad con el maestro Salvador Itriago y en la confianza y apoyo de su hija Trina Itriago, La caja Teatral y nuestra escuela de teatro Escénica en el Centro de Artes Integradas, sueños de años ya tangibles, como no agradecerles a todos ellos”.
DOS SUEÑOS HUMANOS
 Blanco López, con varias décadas en las lides teatrales, reconoce que su profesión es una travesía de aciertos y desaciertos. “Me siento feliz y agradecido por todo lo que he recibido del teatro, pero satisfecho no, siempre podemos hacer más”. Y así lo demuestra, brillantemente, con su decimonovena pieza Noche de guardia, un texto corto que en escena alcanza cómodamente los 60 minutos, donde advierte, en claves características de la llamadas comedias negras o esa comedias sobre aspectos no festivos de la vida, como el inevitable final del camino de los humanos, especialmente de los hombres, que logran pasar el medio cupón, por lo menos.
Noche de guardia es la historia de cuatro viejos quienes deciden que uno de ellos no vivirá más y planifican  ayudarlo a bien morir, porque un cáncer  terminal (de origen prostático) lo ha dejado inútil, tanto que no puede realizar sus taras higiénicas intimas, además de otras complicaciones. Ante un eventual suicidio del enfermo, ellos traman eliminarlo con una sobredosis de morfina. Tarea que hacen. Eutanasia o como se llame es lo que pone fin, por ahora, a uno de ese grupete de ancianos amigos, Alfonzo en este caso, encarnado por ese señor de la actuación que es Antonio Cuevas.
Noche de guardiaes otra pulcra producción de su grupo Bagazos, con cuatro actores sobre los 60 años o cercanos a tan concreta barrera, quienes materializan, de gran manera,  sus peculiares personajes y lograr plasmar en la escena sus  reclamos  ante lo injusto y terrible de la vejez, con un especie de canto coral a la amistad, estremecedora y hermosa  invitación para luchar por el derecho a decidir, al tiempo que hacen  un recuento de lo vivido y  entonan un cántico final quizás, al darse cuenta que la vida siempre nos dará motivos para sorprendernos y para desear que no todo termine ahí. Quizás sea la moraleja, nos atrevemos a puntualizar.
El montaje resultó fascinante, intenso, con turbulencias y temores, pero reconfortante y de mucho crecimiento profesional y artístico, porque hay una entrega total de esos excelentes actores, de indudable calidad humana y depurado profesionalismo. Nada fácil es hacer de viejo y convencer y ahí ellos no solo lo demuestran.
Mientras llega la cura para la vejez ,capaz además de detener la muerte de los seres humanos, dos grandes sueños en estos momentos, los teatreros (con los dramaturgos a la cabeza  y entre  ellos Blanco López) hacen espectáculos para advertirles a sus públicos de las vicisitudes de esas nada fáciles etapas de la vida, aunque actualmente la ciencia al tiempo que busca otros mundos y fabrica armas capaces de desaparecer a la vida misma, también persigue la eterna juventud y por ende la perpetuidad de la raza humana.


El teatro comunitario caraqueño está en escena

$
0
0
José Luis León

El teatro comunitario caraqueño se tomó las salas tradicionales de Caracas y por eso recién se mostró en la esquina de Cipreses y en La Guaira. Y por lo vientos que soplan ya incluso alistan la programación de fin de año. El teatrero y operador José Luis León cuenta aquí lo que está pasando y para lo cual los espectadores deben irse preparando.
¿Cómo surge este movimiento de teatro de las comunidades caraqueñas?
En el año 2016 desde la Red de Teatro y Circo del Distrito Capital, una instancia organizativa y de planificación en beneficio del teatro en Venezuela, se planteó algo que no es nuevo en nuestro país, pero que considero no se le ha dado el justo valor, el desarrollo de un movimiento teatral comunitario, allí nace el Taller Comunitario Teatral “Las esquinas de Caracas”, de la mano de varias agrupaciones e instituciones, como son: Actividades Alternas,  Laboratorio Teatral Anna Julia Rojas, Igual a uno Teatro, Teatro Tres, Compañía Nacional de Teatro, Escuela nacional César Rengifo y un grupo de jóvenes tesistas de Comunicación Social de la UCAB, estos últimos se sumaron para el registro audiovisual de la experiencia. La idea principal  fue retomar los orígenes del teatro, basándose en la oralidad, las tradiciones, lo religioso en fin, elementos originarios para la conformación de un movimiento teatral de la comunidad para la comunidad.
¿Cuál ha sido la receptividad de estos artistas no académicos?
Ha sido una experiencia gratificante, la respuesta de la comunidad ha sido sumamente importante para el desarrollo de la actividad, ya que, han aportado sus conocimientos de vida y sus experiencias a favor del impulso del proyecto, lo han tomado como suyo y desde allí se ha abierto un mundo de creación, un mundo de reafirmación de la identidad. Uno de los ejemplos más importante de la receptividad es el incremento a más de sesenta participantes, y la solicitud de inclusión de otras parroquias, al momento funcionamos en cuatro parroquias, San Juan, San Agustín, Altagracia y el Recreo
 ¿Usted cree que un movimiento de teatro comunitario apuntalaría el desarrollo del teatro profesional en la medida que aportaría más espectadores?
Indudablemente, el teatro como lugar de encuentro de la sociedad donde se cumple la perfecta comunión entre el público y los artistas para exponer ideas, reflejar la sociedad, espacio de participación, critica y discusión, es allí donde este teatro comunitario abre una puerta inmensa a la participación de nuevos espectadores, que indudablemente enriquece la asistencia de un público que lo aborda como una experiencia novedosa y única.
 ¿Cómo trabajar con ellos y como llevarlos a que ellos mismos escriban sus textos o hagan propuestas escénicas?
Este proceso es abordado en principio como un espacio para el encuentro alrededor del arte teatral, sin imposiciones, de hecho los guías o monitores son profesionales del teatro que van entregando sus conocimientos y herramientas teatrales a medida que los participantes las van necesitando, es decir, se estimula al participante a la creación de cada una de las partes que componen el teatro y la necesidad para la comunicación y el dialogo teatral es el que marca la pauta de trabajo. Uno de los objetivos que siempre está en la rueda del encuentro es la sensibilización a un lenguaje donde lo artístico esté siempre presente, pero esto siempre lo construye el colectivo, el monitor es un facilitador para todo esto, el hallazgo es del grupo  
¿Qué proyecto estarían dispuestos a continuar, sin desechar el trabajo con más esquinas de Caracas?
En los tres años de desarrollo de esta experiencia comunitaria se ha producido resultados gratificantes, las propuestas de los colectivos han sido variadas, pero lo interesante es que todas apuntan a la reafirmación de la identidad como pueblo. Estamos trabajando temas alrededor de nuestros orígenes, las fiestas tradicionales, la gastronomía, la música y abordaje de textos de autores nacionales. El grupo de participantes en este taller comunitario teatral “Las Esquinas de Caracas”, es un colectivo ávido en investigar, crear y comunicarse. Acompañados de un grupo de profesionales que con ética y mística guían el proceso creativo e instituciones como la Compañía Nacional de Teatro que ha apostado a un teatro que surge desde el pueblo y para el pueblo. Todos comprometidos con este proyecto en el que vemos al teatro como una herramienta de conocimiento donde los hombres y mujeres interpretan el mundo, dando soluciones y respuestas en su pensamiento, imaginación y acción. 






Cayito Aponte taxista

$
0
0
Memorable actor y todo un señor venezolano.

Se marchó. Culminó su jornada y aquí lo queremos recordar con la última nota que escribimos sobre uno de sus trabajos teatrales. Es mi homenaje para un señor actor.
Aquel 16 de febrero de 2013 publicamos:
José Ignacio Cabrujas afirmaba que Cayito Aponte era uno de los mejores actores del mercado teatral durante la década de los 80 y hasta soñó invitarlo a participar en uno de sus proyectos. Eso nunca se consumó en la escena…ni el espacio ni los tiempos venezolanos lo permitieron jamás.
Y recordamos esa anécdota, relatada sensiblemente por la productora y autora Iraida Tapias, porque hemos visto y disfrutado con la gran performance que Cayito Aponte desarrolla en el unipersonal Los taxistas  también tienen su corazoncito, excelentemente escrito y bien puesto en escena por Néstor Caballero (1951) y Vladimir Vera (1978), respectivamente, en la sala experimental del BOD, donde hace temporada. 
A Los taxistas también tienen su corazoncito lo vimos por vez primera, hacia 1989, en la sala Horacio Peterson, con el actor Omar Gonzalo, bajo la égida de Rubén Rega. Pero Caballero, quien nunca queda satisfecho con lo que le revelan sus piezas desde la escena, siempre revisa y reescribe sus textos en pos de una perfección mayor, tal como lo hacía su amigo Rodolfo Santana, pero sin caer en el “obricidio”. Volvió a sumergirse en los meandros de Los taxistas también… y de ahí sacó otra obra, la cual tampoco será la definitiva, y se la entregó a la productora Jorgita Rodríguez para que la hiciera espectáculo.
Jorgita Rodríguez, pequeña de estatura, pero ambiciosa en sus proyectos, almorzó con el publicista y crítico Douglas Palumbo y el postre fue la invitación para que Cayito Aponte se involucrara en el montaje; este, por supuesto, a sus 78 años no tiene miedo- nunca lo tuvo- al trabajo artístico y más si lo que le proponen le gusta o lo ha vivido. ”Le eché pichón, tras devorarme sus páginas”, dijo después en charla con la prensa.
Es así que Los taxistas también tienen su corazoncito, en versión 2013, inició otra vez su periplo teatral, para enseñar lo que siempre fue: una hermosa y desgarrada historia de amor con final trágico; la parábola existencial del modesto taxista Rubén Sarmiento y la revolucionaria comunista Milagros Daza, otra saga digna de ser llevada al cine, ese que indaga en el pasado para rescatar las claves de nuestra historia democrática.
Rubén Sarmiento entra a escena con una maleta  y busca, en  un semi abandonado  taller mecánico, los restos de su taxi ”Pepón”, y ahí, en un santiamén, tras crear la básica ambientación, se desgrana su historia, apuntalada con la música venezolana de siempre, que va desde el 17 de octubre de 1945, en El Nuevo Circo, vísperas del derrocamiento del general presidente Medina Angarita, hasta la muerte de su esposa Milagros Daza, en los aciagos meses de 1962, tras evocar a Betancourt, Gallegos, Pérez Jiménez y el legendario Pedro Estrada, a quien le hizo una carrera al Palacio de Miraflores.
Caballero toma la historia venezolana y la ficciona para que su prédica ideológica y la metáfora estremezcan al público, las cuales en esta ocasión anudan las entretelas de los espectadores por la rigurosa composición del Rubén logrado por Cayito, utilizando la panoplia de un comediante que usa cuerpo, voz y su cansancio para crear tan hermoso espectáculo.
Cayito, veterano de muchas lides teatrales y operáticas, utiliza todos los recursos aprendidos y crea, esa es la verdad, a un ser de carne y hueso, enamorado de su país y enloquecido por los amores de la comunista Milagros, a quien conoció porque la llevó a las veredas de Coche en una Navidad que jamás olvidará.
Deberían los profesores de actuación de Unearte, o de alguna de las escuelas de teatro que hacen vida en Caracas, solicitar de la productora Jorgita Rodríguez una clase de actuación con Cayito, porque así, en caliente, podrían aprehender de las técnicas y de los trucos que Cayito Aponte usa, además del mágico uso que hace de su aparato foniátrico. Él, por supuesto, estará feliz de ser tomado en cuenta por “los nuevos pichones” que tiene el arte escénico criollo.
El autor Néstor Caballero, por supuesto, sigue revisando los textos escritos, casi una veintena, y adelantando otros, además de una novela


Noche de guardia con eutanasia

$
0
0
Un cuarteto que toma una decisión drástica
 Mientras llega la cura para la vejez y que además detenga la muerte de los seres humanos, los teatreros (con los dramaturgos a la cabeza) hacen espectáculos para advertirles a sus públicos de las vicisitudes de esas nada fáciles etapas de la vida, aunque actualmente la ciencia al tiempo que busca otros mundos y fabrica armas capaces de desaparecer a la vida misma, también persigue la eterna juventud y por ende la perpetuidad de la raza humana.
 Tan maravillosa tarea de los teatreros no es reciente, tiene sus siglos por supuesto, pero en Venezuela, el pais donde siempre se está comenzando porque tiene además una frágil memoria, hay gente como Gerardo Blanco López y José Jesús González (autor- director de Par de viejos) quienes escriben sus textos y los presentan a sabiendas que son comedias negras, nada gratas para unas audiencias que quieren ver cosas bonitas y agradables, pero que si se pueden degustar, si se las proponen, sus reflexiones sobre esos temas tan complejos. Y, ojo, pueden ser los únicos, históricamente.
Blanco López, con varias décadas en las lides teatrales, reconoce que su profesión es una travesía de aciertos y desaciertos. “Me siento feliz y agradecido por todo lo que he recibido del teatro, pero satisfecho no, siempre podemos hacer más”. Y así lo demuestra, brillantemente, con su decimonovena pieza Noche de guardia, un texto corto que en escena alcanza cómodamente los 60 minutos, donde advierte, en claves características de la llamadas comedias negras o esa comedias sobre aspectos no festivos de la vida, como el inevitable final del camino de los humanos, especialmente de los hombres, que logran pasar el medio cupón, por lo menos.
Ahí están, porque de teatro realista, o hiperrealista, se trata, dándoles vidas a sus patéticos personajes, un cuarteto de comediantes consagrados como Alejandro Mata, Pedro Durán, Carlos Abbatemarco y Antonio Cuevas; ellos materializan a seres como Eliezer, Neftalí, Lucas y Alfonzo. Noche de guardia se trata de otra pulcra producción de su grupo Bagazos, todos actores sobre los 60 años o cercanos a tan concreta barrera, quienes materializan, de gran manera,  sus peculiares personajes y lograr plasma en la escena sus  reclamos  ante lo injusto y terrible de la vejez, con un especie de canto coral a la amistad, estremecedora y hermosa  invitación para luchar por el derecho a decidir, al tiempo que hacen  un recuento de lo vivido y  entonan un cantico final quizás, al darse cuenta que la vida siempre nos dará motivos para sorprendernos y para desear que no todo termine ahí. Quizás sea la moraleja, nos atrevemos a puntualizar.
La anécdota de Noche de guardia es la historia de cuatro viejos quienes deciden que uno de ellos no vivirá más y planifican  ayudarlo a bien morir, porque un cáncer  terminal (de origen prostático) lo ha dejado inútil, tanto que no puede realizar sus taras higiénicas intimas, además de otras complicaciones. Ante un eventual suicidio del enfermo, ellos traman eliminarlo con una sobredosis de morfina. Tarea que hacen. Eutanasia o como se llame es lo que pone fin, por ahora, a uno de ese grupete de ancianos amigos, Alfonzo en este caso, encarnado por ese señor de la actuación que es Antonio Cuevas.
TRILOGIA DE PREMIO
Esta Noche de guardia es la forma que utiliza Blanco López para alejarse, inútilmente, de lo inevitable, “es un abrazo cálido a los viejos que nos ha tocado cuidar y que han sido un espejo, un recordatorio de lo próximo. Hace parte de mi trilogía sobre la ancianidad, que comenzó con La cuadrilla (1996), sobre la vejez en pareja; Nos vemos el miércoles (2017), la vejez a través de la visión femenina, y ahora Noche de guardia (2018), la ancianidad a través del prisma masculino”.
Noche de guardia, nace al igual que Nos vemos el miércoles  de la experiencia vivida durante la gravedad de su madre, de las horas con ella durante su enfermedad y la necesidad de brindar un homenaje a nuestros viejos amados durante sus "años dorados" como suelen llamarlos. Esta reciente pieza, Noche de guardia, es mucho más reflexiva, ahí la risa se entrelaza con la dura realidad de la vejez y la enfermedad de uno de los cuatro amigos que se reúnen una noche para cuidar al enfermo, resulta sorpresiva y propone una serie de dilemas que nos harán reír y reflexionar.
ANCIANO GAY
Vale la pena apuntar que la homesexualidad oculta o en el closet es otro de los temas que aborda Blanco López, tangencialmente, pues uno de los amigo ancianos, Neftalí, a sus 75 años confiesa, en esa peculiar noche de guardia, que es gay y que no puede seguir oculto porque además está enamorado de otro hombre, por supuesto, y que ya se lo reveló a su esposa y sus hijos. Quiere vivir lo que le queda en plena libertad y amando. Sus amigos inicialmente lo rechazan inicialmente pero al final lo aplaudan y lo aceptan.
Para el dramaturgo Blanco López escribir es un ejercicio de intimidad fascinante, un descubrir imágenes que reclaman su autonomía, las cuales batallan por tener vida propia y en esta Noche de guardia lo demuestra con una dirección actoral de filigrana, con el apoyo de sus cuatro viejos, sus personajes protagonistas. El montaje es fascinante, intenso, con turbulencias y temores, pero reconfortante y de mucho crecimiento profesional y artístico, porque hay una entrega total de esos excelentes actores, de indudable calidad humana y depurado profesionalismo. Nada fácil es hacer de viejo y convencer y ahí ellos no solo lo demuestran

Razones blindadas de Cervantes,Kafka y Vargas

$
0
0
Un espectáculo inolvidable.

El teatrero Luis Bernal insiste en producir, dirigir, actuar, promover y hacer temporadas con su estremecedor espectáculo La razón blindada, el cual presenta actualmente en la Sala La Viga del Centro Cultural Chacao.
Este Bernal, nacido en el tachirense San Cristóbal y quien desde aquel año 1972 está sin reposar por los avatares de su existencia, ha buscado ser útil a la patria y su familia por intermedio del esmerado cultivo de las artes escénicas. En el Taller Nacional de Teatro (fundado por Carlos Giménez en el mejor momento de su huracanada existencia aquí en Caracas) se hizo teatrero hace más de 20 años y ahora, al frente de su agrupación productora “Con los pies en las tablas”, repone ese poético texto del teatrero argentino Arístides Vargas (Córdoba, 1954) sobre sendos quijotescos personajes.
Esta es la segunda vez que vemos este montaje, después de haberlo ponderado el año pasado en el Teatro San Martín, de Artigas. Y ahora prosigue con el mismo valioso equipo humano que ha logrado armar, como lo es el primer actor Salomón Adames, con la asistencia de Demis Gutiérrez y el soporte escenográfico creador por Armando Zullo: dos monstruosas sillas que se convierten en celdas y muros para impedirles soñar.
Calificada como un poema dramático para exaltar el poder liberador de la imaginación y como forma de resistencia a la represión, La razón blindada está basada en la vida real de “Chicho”, hermano de Vargas, otra víctima de la dictadura argentina, y toma ideas y conceptos de El Quijote de Miguel de Cervantes y La verdadera historia de Sancho Panza de Franz Kafka.
Se ha elaborado una especie de libreto o guión sobre la supervivencia de dos presos políticos, de esos que a mala hora pululan en este balcanizado continente: De la Mancha y Panza, quienes se encuentran a las tres de la tarde de cada domingo, el único día   que se pueden ver en el patio de la cárcel, para tratar de representar una historia que les permita “liberarse” a través de la imaginación del encierro al cual fueron sometidos. Ambos sobreviven en el inframundo que representa la prisión a la cual fueron condenados injustamente. Ellos se entregan a un ritual con sus personajes entregados al frenesí de la locura real o imaginaria donde la ficción y la realidad deben cohabitar para que la vida sea posible. Ya que la creación de un mundo paralelo al infierno diario hace posible la salvación, ha dicho el mismo Bernal, quien encarna a Sancho Panza.
Ya Arthur Miller recordó, en una ocasión menos dramática que la plasmada en la escena actual, que el teatro es el único lugar que tiene el hombre para vivir y soñar en libertad, aunque en La razón blindada todo es más patético y hasta lacerante. Los “dos privados de libertad” física se salvan porque sueñan con el amor, hacen teatro y esperan que llegue la justicia. No puede haber amor sino hay justicia, dijo el poeta Juan Liscano años ha, quien, precisamente, predicó “que los poetas tenemos que seguir envenenando las cosas reales del mundo para que no las olviden los hombres del poder, quienes andan siempre entre sus cifras, sus monedas, sus novedades o sus máquinas”.
En La razón blindada se sufre con estos seres humanos sometidos a un castigo brutal e injusto, donde se desprende el terror que nos imponemos con las desgracias a las que nos sometemos y la grandeza que nos pueden dejar los momentos más degradantes de nuestra existencia.
Cabe destacar que estos dos antihéroes de Arístides Vargas sobrellevan humillaciones y derrotas, pero se empecinan en retener el espíritu lúdico, el afán de aventuras. Van de la llanura manchega a la Patagonia, cruzan montes y ríos para arribar al páramo andino… pasan el “túnel intangible” y con la frágil pero imbatible fuerza de aquellos presos políticos, exiliados, rebeldes- que conservan la ternura, la risa, y la pasión por jugar y crear- historias para alcanzar la libertad profunda; esa utopía que todos parecemos perseguir alguna vez.
Es, sin lograr dudas, un espectáculo agotador, que atrapa al público y prácticamente lo hace parte de sus lacerantes vivencias, lo cual se logra por la veracidad de sus actuaciones y por la intensidad y la dinámica de la puesta en escena.
De La Mancha, personaje creado por el primer actor Salomón Adames, es aquel caballero sediento de aventuras y desbordante pasión por su Dulcinea, loco-lúcido, manchego, patagónico o tropical, que por encima de su origen geográfico, es el paradigma del idealista. Un Quijote que confunde cárceles con paraísos y desiertos, y que se exilia en la sinrazón, en ese extraño desorden que no hace mal a nadie pero que ayuda profundamente a vivir. Mientras que Panza,​encarnado sobriamente por el actor y director Luis Bernal, representa a la perfección la dualidad entre el personaje literario y el creador de historias coexistentes en él. Dos personajes muy expresivos y convincentes capaces de hacer reír, llorar, sufrir por ellos y con ellos hasta el final de la obra.
Esta puesta en escena de Bernal se caracteriza por su depurada sencillez y por la autenticidad de las actuaciones y la escenografía –un par de sillas que se convierten en rejas y en otros marcos básicos para apuntalar las acciones actorales- es una especie de tercer personaje, metálico en su esencia pero hermosamente útil y hasta “frágil”. Un gran aporte de Zullo.
Con un tono, lúdico, algunas veces trágico y otras veces humorístico, La razón blindada mantiene cautivada la atención del espectador de principio a fin, en sus intensos 80 minutos de representación.
Y tenemos que reconocer, parafraseando al inolvidable Carlos Giménez, que Bernal es un auténtico comunicador moderno, insertado y profundamente comprometido con los tiempos que vivimos en esta América, y es, ante todo, un promotor del futuro. Él podía dedicarse a cualquier otra actividad teatral con piezas “más digestivas” y le iría “comercialmente” muy bien, pero lo suyo es el teatro comprometido, de honestos contenidos, más nada. ¡Un acto existencial muy respetable en estos tiempos!


La Nonna reaparece en Guanare

$
0
0

Desde Guanare, donde el teatro nunca se detiene gracias al talento y la capacidad de trabajo de su gente y su público, anuncian el estreno de La Nonna. Aníbal Grunn encarna al legendario personaje protagónico y es el quien nos advierte, algunas cosas que los caraqueños, o los venezolanos, debemos saber.
¿Por qué eligieron La Nonna?
La Compañía Regional de Teatro de Portuguesa, es fundamentalmente una compañía de teatro de repertorio. Este año se cumplen exactamente diez años que estrenáramos por primera vez esta maravillosa obra del dramaturgo argentino Roberto Tito Cossa, y nos pareció pertinente remontarla. Nos vimos en la necesidad de modificar el elenco original, como así también hacerle algunos cambios al espacio escénico. Pero en esencia, la obra es la misma, con el mismo agudo y profundo sentido crítico y social. Por otra parte, mucho público que la habían visto aquella primera vez nos decían: "¿Cuándo reponen La Nonna? Y tú sabes que el público es quien manda. Es la oportunidad y es el momento de hacerlo.
 No hay que olvidar, como afirman en Internet, que La Nonna se estrenó el 12 de agosto de 1977 en el teatro Lasalle de Buenos Aires, durante un período caracterizado por la inestabilidad política y social argentina. La Nonna supo salvar esa barrera gracias a su estilo simbólico y reflexivo, en el que subyace su carga crítica, y además consiguió una gran acogida en las representaciones que se realizaron de ella. Es una pieza teatral de gran transcendencia y eso lo conocen algunos venezolanos.
¿Cómo fue ese proceso de montaje en Guanare?
En principio con el rigor y la disciplina que caracteriza a la CRTP. Este elenco, mucho más maduro y con más experiencia, fue encontrándose con un texto divertido, grotesco, ácido y casi absurdo. Fueron desentrañando cada texto, cada mirada, cada gesto y ayudándome muchísimo, ya que yo, después de muchísimos años, iba a actuar y dirigir al mismo tiempo. Eso sí fue complicado para mí y para ellos. Pero somos un equipazo y todo iba fluyendo maravillosamente en cada ensayo. Nos armamos de paciencia y sobre todo de solidaridad. Yo había escenas que bajaba o las dirigía desde la habitación de La Nonna, pero lo más asombroso y divertido era verme dirigiendo vestido de mujer y con la pañoleta negra en la cabeza. Toda una experiencia.
¿Cuántas funciones han programado en la primera temporada?
El estreno está pautado para el jueves 6 de septiembre y hasta el domingo 23, un total de diez funciones que podrían prorrogarse si el público lo pide.
¿Cuándo la traen a Caracas?
Está en nuestros planes una gira nacional que incluiría Caracas, por supuesto. Con ese fin se ha montado. Tú sabes que nos gusta mucho presentarnos en Caracas y hacer temporadas. No creo que podamos hacerlo este año, ya que el semestre está lleno de actividades, pero es muy posible que arranquemos el año con esa sorpresa.
¿Cuál es el elenco?
El elenco es el elenco estable de la CRTP: Mercy Mendoza, Wilfredo Peraza, Evis Cuellar, Giuseppe Fischetti, Emilger Arroyo y Carlos Moreno. Ah, bueno y yo en doble rol, director y actor. La escenografía es de Manuel Manzanilla, el diseño de luces de Kelynson Berríos y la asistencia de dirección de Rosangélica Sánchez  Esta vez hemos incluido en la parte técnica a dos alumnas de nuestro y taller de formación actoral: Jhessika Betancourt y Emili Valladares.


Un millón de aplausos para la CNT

$
0
0
El teatro de la CNT se mostró en seis ciudades venezolanas.

La Compañía Nacional de Teatro (CNT) recorrió una parte del país venezolano en una gira especial con la pieza del elenco estable Baño de damas, original de Rodolfo Santana y dirigida por Aníbal Grunn, desde el 9 hasta el 19 de agosto por los estados Miranda, Aragua, Carabobo, Cojedes, Yaracuy y Lara. Este desplazamiento por los selectos escenarios de Los Teques, Maracay, Valencia, San Carlos, San Felipe y Barquisimeto fue catalogada por la mayoría de sus espectadores como divertida, pero con temas polémicos que invitaron a la reflexión, “nada de teatro banal y comercial”, subrayaron.
Sobre  lo que significa esta primera gira de   Baño de damas, las primeras actrices Aura Rivas y Francis Rueda, además del primer actor Gustavo Meléndez, recordaron que  con sus interpretaciones  y, como es lógico,  las de todos los otros miembros del elenco, se le rindió homenaje a la mujer  venezolana, se le hizo una oda al comportamiento femenino en sus diferentes facetas, pero al mismo tiempo fue denunciado el machismo que sigue manteniendo acorralado a las féminas en Latinoamérica y gran parte del mundo sin importar su condición social o económica.
Para Aura Rivas, a quien la encontramos muy entusiasmada por la activa participación de los públicos que los vieron y aplaudieron, manifestó estar muy satisfecha de los hechos. “Yo he ido muchísimas veces al interior de nuestra república, y se cómo se compartan los espectadores, no puedo olvidar que con la CNT, en anteriores administraciones, llevamos ese hermoso montaje que era Pedro Navaja y el público enloqueció. La gente, hoy por hoy, está muy informada, gracias a la prensa y la televisión, y nos preguntaron muchas cosas sobre el teatro que se está haciendo en Caracas. Algunos nos preguntaron, insistentemente cuando regresaríamos. En San Felipe, especialmente, fue tal la avalancha de público que no pudo ingresar a la sala, que tuvimos que regresar para hacer otra función, a instancias de la gobernación del estado Yaracuy.
 Aura  admite que no es fácil realizar una gira por las ciudades del interior venezolano, por los costos y por la logística que exige cada montaje, pero cree que la CNT se arriesgó y salió hacia adelante ante el impacto que tuvo en cada una de las poblaciones. ”Ojala se pueda repetir, por lo menos dos veces al año. Todo depende, como es lógico, de los presupuestos. Fue maravilloso ese millón de aplausos que recibimos”, puntualizó.
 Francis Rueda considera que esta gira de Baño de damas fue muy productiva y hermosa. Además hacía años que el interior no se veía un espectáculo de la CNT, salvo las administraciones anteriores, las de Chocron y Pantelis Palamides. Nos encontramos con gente nos vieron en aquellos tiempos y nos presentaron a sus esposos y sus hijos. Fue encontrarnos con valiosas familias venezolanas habidas de teatro””
 Francis, venezolana por los cuatro costados y muy comprometida con el proceso en que está inmerso el pais, cree que las autoridades culturales del pais, como el ministerio de Cultura que actualmente comanda Ernesto Villegas, deben sumar esfuerzos, con otros ministerios para llevar más teatro a las comunidades del interior del pais, “es necesario y oportuno hacerlo, así como la CNT lo hizo también lo pueden hacer otras instituciones, en danza, por ejemplo. En medio de las crisis el talento debe superar los obstáculos”, enfatizó.
Observó Francis que muchas de las edificaciones teatrales que utilizaron están casi abandonadas y carecen de las comodidades básicas para los espectadores y el público, “pero nos dejamos deprimir por eso y trabajamos con mayor gusto, como es el caso del Teatro de la Ópera de Maracay, el cual que rivaliza con Caracas, por su rigor profesional y su capacidades.”
 Comento que entre el público  conoció a mucha gente  le pidió talleres de formación artística,  “porque la gente joven y hasta los mismos adultos  quiere hacer su teatro  y así contar sus historias y no tener  que venir a Caracas para capacitarse. “Conocí, incluso, gente que por primera vez veía un espectáculo teatral y quedaron, por supuesto, impactada y agradecida. Yo nunca había podido palpar y conocer a una audiencia como esta y llevo no menos de 40 años en las lides teatrales. Los artistas debemos mirar hacia el interior de nuestro país, no podemos dejarlo abandonado.
 Considera Gustavo Meléndez que es muy importante todo lo que vio en esta su primera gira con la CNT. “Llevaba no menos de 17 años sin recorrer esas hermosas ciudades donde nos aplaudieron. Imposible olvidar a ese público, tan receptivo y ansioso, vi gente que pedía autógrafos y tomaba fotos con Francis Rueda y Aura Rivas, entre las otras actrices, porque las recordaban por sus trabajos en cine o en televisión”. Considera que al público le impacto la temática de Baño de damas, especialmente porque ahí se alude a los diversos prototipos de familia que existen Venezuela, pero el público no se quedó solamente en la anécdota general de la pieza, sino que incluso, fue más más allá del cuento teatral. Creo que si es importante que la CNT haya retomado este acercamiento con las comunidades y lamento que no pudimos conversar   con algunas de la agrupaciones teatrales que existen en esas ciudades”.


Medida por medida o las mujeres virtuosas

$
0
0
Shakespeare a la venezolana y con calidad.

Sentado en el regazo de mamá vi mi primer espectáculo teatral. Habíamos huido desde Palmira porque se peleó con su marido. Resolvieron sus problemas; él era un buen hombre, se casaron después y a lo largo de más de medio siglo criaron y educaron -además de mí- siete varones, y una hembrita, a quien bautizaron Laura, como ella. Años después, al comenzar mi adolescencia, le pedí a mi madre que ampliara los detalles de aquella ceremonia con música y actores que habíamos visto en el teatro Colón de Bogotá, durante los años 50; era una opereta sobre Genoveva de Brabante, casta esposa vilipendiada por un canalla mayordomo. Aquello me gustó por todo lo que ella dijo y me marcó para siempre: la lucha por las mujeres y todos los demás seres desvalidos o perseguidos injustamente.
Mi hermana Laura me llamó el sábado 25 de agosto, a las 7:43 AM, para darme la fatal noticia. Mamá había muerto, a sus 93 años, tras una larga enfermedad, en Nueva York, a donde no pude viajar para estar algunas horas a su lado, porque no hubo visa disponible. ¿El teatro nutre a la vida o la vida se nutre del teatro?
Registro esto tan íntimo y personal porque ese pasado sábado, ahora inolvidable por la definitiva ausencia de mamá Laura, después de las 11 AM, fui  a ver el montaje Medida por medida, una pulcra versión de Federico Pacanins, productor ejecutivo además, dirigida muy bien por José Tomás Angola y actuada ejemplarmente por Antonio Delli  como el  Duque, Sandra Yajure era  Isabella, la hermana de Claudio, Gerardo Soto como el Gobernador de Viena, Ignacio Marchena, José Antonio Barrios, Rafael Gorrotochegui, Brixio Bell, Salvador Pérez  Castro, Andrea Miartus, Silvia de Abreu, Andrés Sierra,  Edgar Sibada, Zahir Mora, Federico  Moleiro.  Y como el correctísimo trovador, Juan Carlos Grisal.
Pero este montaje no habría podido llegar a puerto seguro si además de la cuidadosa dirección de los actores, adelantada por Angola Heredia, no  contara con un bien sincronizado equipo técnico que trabajó con empeño y dedicación, como lo hizo la talentosa Fabiola Neri con la ayuda de Elizabeth Yrausquín; con el aporte del estupendo profesional  Manuel Troconis, mientras que el diseño y la realización escenográfica es otra contribución del maestro Freddy Belisario,  y no podía faltar el talento para la multimedia y el mapping, precisamente de uno de los mejores en Venezuela, como lo es José Martínez. Todos bajo la batuta de ese gran productor, que es Carlos Silva. Una producción de fino lujo y depurada calidad profesional. Un ejemplo más para estos difíciles tiempos.
EL ABUSO CON LAS MUJERES
Medida por medida es una de las piezas shakepereanas favoritas de Harold Bloom, quien precisamente durante estos días  debe haber  revisado todos sus escritos y especialmente la participación de los personajes femeninos,  porque se ha incrementado  el interés informativo y social sobre el abuso hacia las mujeres, desde que Hollywood los visibilizara a través de la campaña #METOO en las  redes sociales y en la entrega de los Globos de Oro, con una gala teñida de negro y convertida en un espacio para la reivindicación de un trato digno e igualitario bajo el lema 'Time's Up', como reseñan los periódicos españoles, especialmente.
La decisión de hacer Medida por medida  en este momento para Venezuela fue del productor ejecutivo y versionista Federico Pacanins, quien es un hombre no solo de la música y el teatro, sino que lo es del arte integralmente. Por su formación académica, es abogado, le interesaba sobre manera el tema de la justicia. Y ahí ha fijado su posición como intelectual venezolano que se respeta.
El director Angola Heredia considera que en Medida por medida el meollo dramático versa sobre la imposibilidad de que la justicia humana pueda alcanzar eso que llamamos la verdad. La hipocresía, la falsedad, en cuanto hablamos de las pasiones y la moral, nos hace muy débiles para juzgar en otros, delitos a los que somos propensos por nuestra esencia carnal. “Esta obra le apasionaba a Pacanins desde hacía años, tanto que enfrentó su versión escénica manteniendo un gran rigor. La obra sigue teniendo sus cinco actos, dura 2 horas y media, con un intermedio de 10 minutos. Pero atendiendo muy de cerca la lectura crítica que de ella hizo el poeta W. H. Auden, propone unos afeites menores y de estilo, en donde suprime ciertas reiteraciones de trama, muy de Shakespeare para que los espectadores de su época no se perdieran, y esto agiliza el ritmo sin sacrificar trama. También sirvió de catalizador entre las muchas traducciones de que se valió. Como sabemos las traducciones de Shakespeare son en sí mismas nuevas obras. Es imposible mantener y recrear en español la belleza plástica y la melodía de los versos yámbicos en inglés”.
Entonces el versionista Pacanins, afinando su oído de melómano ensambló las mejores traducciones y las más cercanas al espíritu original de la obra, modulándolas y atemperándolas a nuestro presente.  Esto no significa, sin embargo, que los diálogos se hayan "venezolanizados", simplemente plantea una lectura más casual y comprensible, sin desantender la poesía y la musicalidad. Creemos que Pacanins logró un trabajo muy cercano a lo que Shakespeare originalmente escribió, apunta Angola Heredia y nosotros reiteramos.
Nosotros disfrutamos como nunca por la limpieza del texto, por la sencillez de la puesta en escena y la fluidez del cuento teatral, sin importar la extensión del tiempo escénico. Algo que no es frecuente en nuestro actual teatro exprés, que se está haciendo a pesar de todo. ¡Bravo!
No hay que olvidar que hacia el año 1603, William Shakespeare escribió  Medida por medida, donde cuenta la historia de Isabella, una joven que intenta salvar a su hermano del castigo de la justicia cristiana, condenado a muerte por haber fornicado con su novia y haberla dejado embarazada, pese a que ambos desean casarse. 
En su intento por detener la ejecución, Isabella se encontrará con los envites del poder, con la corrupción moral y política, viéndose reducida a una mera mercancía en trueque, ya que, alternando la comedia con el drama, constituye una clara denuncia de la hipocresía social y del abuso sobre la condición femenina. La máxima autoridad, el Duque de Viena, se va de vacaciones para probar a su más severo empleado y segundón, Angelo, quien turbado por la belleza, la inteligencia y la inocencia de la joven, trata de hacerle ceder su virtud a cambio de la vida de su hermano. Y no será el único, porque también el Duque, cual el Califa de Bagdad, pero ahora convertido en monje cristiano, regresa e inicia un cortejo de seducción en donde la voluntad de la fémina queda totalmente olvidada.
Para el especialista Bloom esta Medida por medida es una reflexión sobre la justicia y por su título hace referencia a la hebrea ley del Talión. Ahí se propone una reflexión sobre la conveniencia de aplicar la ley de modo estricto o racional, y también hace un repaso crítico a los males de las sociedades ejemplificándolo con las relaciones entre sexo y poder .Y es una obra por y favor de los mujeres, no queda duda alguna.
Medida por medida fue estrenada en Venezuela en 1980, en la Sala Alberto de Paz y Mateos, de la mano de Antonio Constante y el Nuevo Grupo. La versión estrenada en ese entonces, bajo la firma de Charles Marowitz, autor, crítico y director de teatro norteamericano, muchos años vinculados a Peter Brook y a la Royal Shakespeare Company.  Su adaptación de Medida por medida, dicho por el propio Marowitz, pretendía cambiar el sentido de la obra. Se concentraba en la agresión sexual sobre Isabela y sus implicaciones morales para la justicia.
El espectáculo Medida por Medida¡más feminista no podía escribirlo ni hacerlo el mismo Shakespeare! , se presenta en el teatro de la Asociación Cultural Alexander Humboldt, en San Bernardino, durante dos fines de semana más.

Preparan más funciones de Las esquinas de Caracas

$
0
0
José Gregorio Magdaleno, uno de los activistas del teatro comunitario.

El popular proyecto de Teatro Comunitario Las esquinas de Caracas no se ha detenido, por el contrario sigue con muchos bríos, según nos lo declara José Gregorio Magdaleno, uno de los guías.
¿Qué programa tienen para estos meses?
Por supuesto que seguimos en la lucha cultural y es por eso que, en primer lugar, mantenemos la obra, Las esquinas de Caracas, durante estos meses, específicamente desde septiembre hasta diciembre del presente año; para ello nos estaremos presentando en algunos teatros como el propio Teatro Alberto de Paz y Mateo, sede de la Compañía Nacional de Teatro CNT, la institución que nos acompaña y apoya, o la sala CANTV, donde funciona uno de los núcleos del Taller Comunitario Las Esquinas de Caracas. Para ello seguiremos ensayando la obra y además realizando actividades formativas con los participantes, hay que recordar que inicialmente es un proyecto que parte de talleres de formación. Igualmente estaremos preparando un trabajo especial para fin de año atendiendo las fiestas decembrinas que siguiendo la filosofía original del proyecto estará enfocado en las costumbres citadinas de esa época festiva.
¿Qué nuevas esquinas caraqueñas van a trabajar?
Justamente, estamos reuniéndonos, el cuerpo de monitores, el equipo ejecutivo y directivo, con José Luis León y Laura Meza a la cabeza, para revisar,  qué nuevo material se incorporará  a la obra o si más bien se desprende un trabajo teatral con otras características formales. En todo caso, siempre será partiendo de las tradiciones caraqueñas, las cuales abarcan también por ejemplo, la gastronomía o la música.
¿Cuál es la agenda de trabajo en las actuales comunidades o las que se añadan?
Después de presentarnos en días recientes en el Auditórium del Instituto Aeropuerto Internacional de Maiquetía IAIM y de las exhibiciones en el Teatro Nacional por el aniversario de Caracas, tenemos un breve receso, para proseguir en este septiembre con los ensayos de la obra. En nuestro caso, el Núcleo de Parque Central, trabajamos en La Rampa, Sala de Teatro, principalmente los días miércoles. Se agregan otros días dependiendo de los compromisos adquiridos. Regularmente se realizan actividades como ejercicios corporales, de respiración y propiamente de actuación. En esta tarea me acompaña Osleyda Pérez.
Es importante señalar que los participantes de este núcleo son todas personas adultos mayores, es decir, personas en su mayoría mayores de 60 años y que poseen poca experiencia teatral previa. Por ello, el trabajo actoral está dirigido, en primer lugar, a lograr que puedan expresarse en el teatro, y en segundo lugar, adecuar el trabajo a sus potencialidades y realidades. Por ejemplo, una de las potencialidades que descubrimos fue la disposición y capacidad para el canto y la música. De hecho Las esquinas de Caracas como obra, tiene un gran peso musical. Así mismo vemos que ellos poseen un ritmo diferente de trabajo, dada sus particulares condiciones físicas, que por ser diferentes no son menos productivas. De alguna manera la experiencia de vida que poseen los hace ser más eficientes en la escena.
La agenda de trabajo, además de las actividades regulares como las antes mencionadas, se encuentra en plena construcción.
 ¿Qué comentarios han recibido?
La recepción del público ha sido maravillosa. Aunque es claro que el objeto del proyecto no es producir un espectáculo profesional con las exigencias que ello demanda, sí existe, igualmente, una clara intención de abordar el hecho teatral con la responsabilidad y el compromiso que el público o el espectador requiere. Se trata de guardar un equilibrio justo en ese sentido. El proyecto en primer lugar busca facilitar un tejido social mediante la atención de una población que necesita ser escuchada, sentirse útil, demostrar sus capacidades productivas y creativas, y en ese espacio nos encontramos no solo con adultos mayores, sino también con jóvenes y niños que desean iniciarse en el teatro o personas con condiciones especiales.
Por otra parte, tratamos de brindar un trabajo que le dé al público un poco de amor por su ciudad, recuperar la calidez perdida de nuestras calles o plazas, o acercarnos al conocimiento de nuestra historia mediante la música, el humor y los sentimientos, en un ámbito con mesura artística.
Creo que esa combinación visual, niños, jóvenes y adultos mayores, impacta al público cuando ven a distintas generaciones, 30 artistas en escena, compartiendo en un escenario. Desde niños de diez o doce años hasta adultos de más de 80 años, todos con una gran vitalidad escénica. Hemos vistos a los nietos de los actores y actrices ver asombrados y emocionados a sus abuelos cantando o bailando en el teatro. Incluso tenemos actores y actrices en la actualidad que se sumaron emocionados al proyecto luego de ver la anterior versión de la obra el año pasado. Personalmente he aprendido mucho de ellos, especialmente de su vitalidad y fe ante la vida.
¿Dónde funciona la base operativa de este movimiento?
En este momento en los diferentes Núcleos o Espacios de trabajo hay actividad. En los espacios de la Escuela de Teatro César Rengifo, bajo la guía de Andrea Hernández y Gerónimo Reyes, en el centro de Caracas, en horarios diferentes a los de clase, por supuesto; en los espacios de CANTV, bajo la responsabilidad de Reynaldo Rivas y en La Rampa, Sala de Teatro, en Parque Central. El año pasado además funcionamos en el Teatro La Alameda en San Agustín. En este momento se está evaluando y trabajando para abrir nuevos talleres en espacios que lo hagan posible.
En nuestro caso, La Rampa, los participantes provienen de diferentes lugares de la ciudad de Caracas, incluyendo dos personas que provienen de Los Teques, además del propio Parque Central. Es importante señalar por supuesto el acompañamiento y apoyo de la Compañía Nacional de Teatro CNT, encabezado por su director general Carlos Arroyo y su equipo de Producción y Gestión, institución que ha creído en la importancia de este proyecto comunitario.

Otro César Augusto a la conquista de Nueva York

$
0
0
César Augusto Cova Burguera,actor.

Otro venezolano allende las fronteras debuta en este blog. Es el actor César Augusto Cova Burguera (Valencia, 13 de septiembre de 1989), quien acaba de ganarse un codiciado premio HOLA, en Nueva York, por sus actividades teatrales y desde allá nos cuenta que nació en la clínica Ceija.
“A pesar de todo soy caraqueño de corazón y le ligo a los Navegantes del Magallanes y todavía aguanto el chalequeo de Valencia ciudad de las naranjas dulces y los hombres caballerosos” A la muestra un botón y que lo digan los que han tomado su jugo de naranja después de bajar el Casupo”. 
Estudió en Caracas. “En el Instituto educacional Aquiles Nazoa me dieron la formación primaria y algunos credos de vida. Creo en el amor y en el arte como vías hacia el disfrute de la vida perdurable. Me gradué de bachiller en el Agustiniano Cristo Rey de Santa Mónica y conservo intactas las memorias de sus salones y sus profesores. El profesor Evelio me dijo, una vez:You’re a big man dreaming on the moon. Y por eso ahora afirmo que Cristo Rey es luz y guía de mi juventud. Por más sueños que tuviera yo mi madre siempre me aconsejo de no dejar la Universidad Santa María, así que me gradué de Comunicación Social, lleno de sueños, fue una época muy interesante y la carrera universitaria me regaló oportunidades de trabajo únicas, tal es el caso de mi gran amigo Adrián Geyer, quien un día me invitó a trabajar en cine e hice junto a él la foto fija y el detrás de cámara de varias películas venezolanas como Piedra, papel o tijera y Azul y no tan rosa. Entre otras vivencias universitarias destaco mis pasantías en LA MEGA Estación “A la cuenta de 3” y en Onda la súper estación “Un Mundo Perfecto”; esas fueron sin duda las mejores experiencias de mi vida universitaria”. 
“Cómo buen capricorniano son persistente en mis metas y por es luego de la Universidad Santa María decidí estudiar actuación en el Stella Adler Studio Of Acting en Nueva York. Cuanta necesidad había en mí de dedicarme a un estilo de vida que me permitiera ser brutalmente honesto y creativo. “Crecer es la más profunda y verdadera necesidad de cualquier ser humano que dice yo quiero ser actor”, me enseñó Stella Adler .
¿Cómo llega al teatro?
Al teatro llegue tarde pero no a destiempo. Tenía 24 años cuando entré al Gimnasio de Actores con Matilda Corral y bastó un momento privado de Howie, personaje de la obra Rabbit hole para darme cuenta lo poder ilimitado de la imaginación, cuanto quería hacer teatro y toda la tarea que tenía. Así que empecé por leerme todas las obras de Henrik Ibsen y Antón Chekhov, tarea que aún no he terminado.
¿Qué espectáculos teatrales hizo en Caracas?
Humor y Amor de Aquiles Nazoa me llevó una vez al teatro Municipal de Caracas. 
¿Por qué el salto a Nueva York?
Pablo García Gámez tiene unas líneas fabulosas que describen en su   monologo Nueva York era una Quimera. Para mí, también, Nueva York era la estatua de la Libertad, la 5ta avenida y la vía Broadway de los teatros. Nueva York era una hermosa tarjeta postal. Nueva York era un sueño y la ciudad me ha concedido otros. 
¿Cómo ha sido su proceso de adaptación? 
El proceso ha tomado su tiempo y su trabajo. Las circunstancias y decisiones de vida me han traído hasta Nueva York pero uno de los sentimientos más constante es el desarraigo. Me ha tomado varios años vencer las barreras del idioma especialmente con textos clásicos como Shakespeare pero  I speak the speech... trippingly on the tongue.
 ¿Qué trabajos teatrales ha realizado hasta ahora, en Nueva York?
 He participado en espectáculos como Otra Historia de Pedro Monge Rafuls, Luz Negra de Álvaro Menen Desleal, El último Selfie de Fernando Azpúrua, El Burlador de Sevilla de Tirso de Molina, Ana en el Trópico de Nilo Cruz, Comedia de la tradición en la amistad de María Zayas y Soto Mayor, El Gos de Pablo García Gámez, La Ronda de Arthur Schnitzel, entre otros montajes. 
¿Premios ganados?
Este año me otorgaron el premio ACE, de la Asociación de Cronistas y Espectáculos de Nueva York, como mejor actor drama por mi trabajo en la obra Otra Historia de Pedro Monge Rafuls. Dos Premios HOLA (Hispanic Organization for Latin Actors) uno por El Burlador de Sevilla (2016) y el más reciente Mejor Actor de Reparto en la obra El Gos de Pablo García Gámez (2018). En el 2017 recibí un premio LATA(Latin Alternative Theater Awards) como mejor actor característico por el personaje del ciego en la obra Luz Negra.
¿Qué proyectos madura o cómo está su agenda de trabajos?
 Ahora trabajo en dos proyectos: Unos cuantos piquetitos, un texto de Layla Rippol, dramaturga española, sobre la violencia doméstica, Donde un hombre mata a su esposa a golpes y testifica que sólo fueron unos cuantos piquetitos. Es una producción de Teátrica y Alfombra Teatro dirigida por Gemma Ibarra. Simultáneamente trabajo junto a mi gran amigo Pablo García Gámez quien me dirige en su monólogo CariaquitoMorado. Participaremos en un festival de unipersonales llamado Monologandoando. El texto es sencillamente maravilloso y trata de un actor venezolano que se muda a Nueva York con ambiciones de ser noticia de primera plana y para eso se prepara con sus mejores monólogos en los cuales se incluyen Los ángeles terribles de Chalbaud, La máxima felicidad y La revolución de Chocrón, Acto cultural y El día que me quieras de José Ignacio Cabrujas y La empresa perdona un momento de locura de Rodolfo Santana. Pablo García Gámez invita a un verdadero viaje teatral en cada uno de sus textos. 
 ¿Cómo llega hasta donde esta ahora o quienes la han ayudado o colaborado?
Llego con la perseverancia y las ganas de mejorar cada día. De buscar lo más importante en escena que es la verdad. Ese siempre ha sido mi norte y ese camino creo yo que nunca se acaba. Sin duda he tenido el absoluto e innegable apoyo de mi familia especialmente  de Rosa Burguera, que dios me la cuide y me la bendiga, del teatro hispano en Nueva York   Directores cómo Leyma López, Fernando Then y Edgar Mozoub. La actriz Zulema Clares, el actor Sandor Juan, Pablo García Gámez, Manolo García Oliva y Carlos Navedo. Repertorio Español, Teatro Sea, HOLA, GOTA. 
¿Nostalgia o usa el retrovisor existencial?
 Trato de visitar cada año a Venezuela y pareciera que se aleja el día de volver. Pero aún guardo la promesa de hacer teatro en mi país. Le debo un show caseal Gimnasio de Actores. Este año tuve un pequeño personaje en una película dirigida por Hernán Jabes Jezabel, basada en la novela de Eduardo Sánchez, Rugeles. Venezuela, mi país, a veces te da regalos inesperados.

El miedo de “Oscuro, de noche”

$
0
0
PABLO GARCÍA GÁMEZ, AUTOR TEATRAL

 Oscuro, de noche, el próximo espectáculo de la Compañía Nacional de Teatro será estrenado  el 27 de septiembre de este agitado 2018, bajo la dirección de Carlos Arroyo y con el elenco estable de la CNT, una empresa cultural del Estado venezolano, creada hace 34 años, bajo la égida de Isaac Chocrón. Mientras tanto, su autor, el dramaturgo caraqueño Pablo García Gámez (22 de septiembre de 1961) prosigue cosechando premios o reconocimientos a su labor creativa, la cual realiza desde hace 25 años en Nueva York, donde, precisamente, acaba de conquistar el Premio HOLA. Él, desde el bureau neoyorquino de Queens, donde reside, informa:
-Incluyendo el HOLA de este año, llevo 13 premios: seis HOLA, dos ACE, dos Proyecto Asunción, un ATI, un Abniel Marat (de FUERZAFest) y mi Apacuana, otorgado por el venezolano Ministerio del Poder Popular para la Cultura a través de la CNT. “Como dato anecdótico, junto con Oscar Colón, figura del teatro hispano, quien ya no está con nosotros, tuve el privilegio de ganar el HOLA por vez primera en 2007 cuando la organización de periodistas y críticos profesionales decidió crear un reconocimiento para la dramaturgia; también fui el primero en ganar el ACE en ese rubro. Otro dato anecdótico: desde el 2014, cada año he ganado el HOLA.
¿Para qué los premios?
Recibir un premio es una manera de aceptación colectiva.  Es la posibilidad de que la pieza cause curiosidad: ¿Sobre qué trata El Gos, la obra por la cual me dieron el HOLA?  Solamente puedo decir que el premio abre caminos, reafirma ante el colectivo que eres dramaturgo, que tu obra posee algún interés.  En cuanto a la forma de las piezas, en mi caso sucede algo particular: la frecuencia con los que los he recibido estos dos últimos años acepta, y creo que hasta avala, la existencia de obras “raras”.  “Raras” en el sentido de mi preocupación, y diría ansiedad, por el tiempo y por la libertad del actor y de la actriz en el proceso creativo así como la idea de que el público esté inmerso en esos mundos.  “Raras” porque son escritas por una voz desde la alteridad.  En el caso del Premio Apacuana, significa que Venezuela está ahí, conmigo; que seguiré mostrando a Caracas en mi interpretación de su imaginería, por eso Oscuro, de noche.
¿Cómo sobrevive en USA?
Enseño en la Universidad de la Ciudad de Nueva York como profesor adjunto. Mis áreas son español, literatura latinoamericana y cultura iberoamericana. Además, manejo las relaciones comunitarias de Teatro Círculo.
¿Agenda de actividades inmediatas?
El 20 septiembre presento Cariaquito Morao en un festival de monólogos, Monologando Ando, organizado por la agrupación Fénix USA y que se llevará a cabo en The Producers, un espacio modesto con varias salas de teatro en la calle 43 y Octava Avenida, e Manhattan.  Cariaquito Morao es una versión de ¿Y qué es Nueva York? que hace poco presentaron en Caracas dos teatreros integrales: el jovencito Dámaso Nieto bajo la dirección del veterano Andy Pérez, como parte de la programación para celebrar los 50 años de la Escuela Juana Sujo… ¡Qué honor!  En esta oportunidad, aquí en Nueva York, lo interpreta César Augusto Cova y la dirige este servidor.  César Augusto es un actor con muchos recursos, con muchas ganas de hacer quien ganó mi respeto al entregarse en cuerpo y alma a El Gos: su premio HOLA es más que merecido.  Me “lanzó” dirigiéndolo porque es un texto muy querido, que significa mucho por muchas razones: es el primer texto que escribí en la ciudad, en el que trato de explicarme Nueva York, en el que conjuro las voces de autores que han guiado la dramaturgia venezolana contemporánea.
¿Qué pasa con Oscuro, de noche?
Ya vi un ensayo especial, durante el pasado mes de julio que me hizo el elenco de la CNT, en el teatro Alberto de Paz y Mateos, comandado por Arroyo y fue maravilloso todo aquello. Solo espero poder regresar para ver el montaje culminado y en su estreno oficial. Quiero ver a esos 13 personajes criollos con una historia común y ordinaria, ambientada en Caracas. Una historia, que como lo dice el payaso, un circense personaje que funge de presentador, encarnado por Andy Pérez), le tenemos miedo. Mucho miedo, Mucho miedo que nos llegue pasar. Miedo de estar en ese singular escenario-ciudad y que a uno de nosotros le toque vivirla…o morirla. Porque cuando nos toca…toca.
¿Qué espera de Oscuro, de noche? ¿Vendría a Caracas para su estreno?
Después de haber visto ese ensayo, solo espero de los actores la precisa irreverencia creativa, que jueguen con las distintas situaciones. Y por el lado de los espectadores, que les motive a comentar, criticar, reflexionar. Espero que decidan la definitiva fecha del estreno para dar una tarjetazo y comprar mi pasaje. No puedo dejar de disfrutar esa ocasión con una obra mía, montada a lo grande, en mi ciudad natal.
¿Se ha asimilado a la cultura de USA o practica la cultura del gueto?
De practicar, practico la cultura del gueto, de guetos o para matizar, del margen, de la periferia.  Estar envuelto en teatro y en estudios del performance me abrió un horizonte sobre la cultura hispana.  Gueto se refiere a esos meta conceptos, a coletazo poscolonial, a películas de acción filmadas en el Bronx.  Todos los días llega gente de paises latinoamericanos y dicen, con mucha ingenuidad y poca modestia que, por primera vez, la ciudad tendrá teatro en español.  Pues, Nueva York tiene una arraigada historia de cultura hispana: por solo dar unos datos, ya desde el siglo XIX se publicaban textos en español, grupos de teatro hispano representaban sus obras en el Apolo (el famoso teatro de Harlem), el primer festival de teatro popular latinoamericano se realizó en Nueva York.  La ciudad cuenta con autores en español de primera línea que por diversas causas -una de ellas es que son del gueto- son poco conocidos en América Latina.  Se tergiversa la historia, se intenta borrar manifestaciones culturales que están ahí. Espero que Oscuro, de noche pueda venir a esta urbe, para que se hagan comparaciones de sus diversas facetas. Para que vean así la historia de Kenny Javier Barrios, aquel muchacho caraqueño que matan para robarle una motocicleta y todo lo que se desencadena, en una sociedad temerosa o miedosa.

Volvió el hombre de la rata

$
0
0
Raimundo Mijares, actor.
Hace temporada en Caracas el actor Raimundo Mijares con el espectáculo El hombre de la rata, afamado texto de Gilberto Pinto (Caracas,1929-2011), el cual fue dirigido por Costa Palamides.
Mijares reconoce que este monólogo es un reto y una aspiración para todo actor. “Desde que empecé en el teatro y supe de este texto me atrajo y estuve, leyéndolo y estudiándolo. Cuando regresé de España en 1991, hablé con Costa Palamides, con quien había tenido muy buena relación en España, para que me dirigiese. Ese es el origen de este trabajo. Bueno, la montamos y nos invitaron al Festival de Oriente, posteriormente fuimos a Margarita invitados por la Municipalidad de Mariño y nos presentamos en la Concha Acústica de Porlamar, adyacente al Hotel Bella Vista.  En Caracas estrenamos en el Teatro Nacional y luego tuvimos varias funciones en el Teatro Cadafe. Luego inexplicablemente, la pieza la abandonamos”.
¿Cómo fue el proceso del montaje?
El proceso del montaje se enfoca en el personaje que es un esquizofrénico.  A partir de allí el director reflexionó sobre la puesta en escena, dándole un vuelco más significativo y minimalista en cuanto al montaje de 1991.  Por supuesto, ha transcurrido 27 años lo cual significa una nueva realidad política, económica, cultural y social. Sí algo puedo decir en cuanto al proceso cómo se concibió el montaje, es que fue asumido con suma responsabilidad, Ensayábamos 3 días a la semana y ya con el texto reaprendido. Asimismo, se tomó en cuenta la situación actual para contextualizar la puesta en escena.
¿Cuál es tu lectura de la pieza?
 Bueno, como sabemos la pieza fue estrenada por su autor el año 1963. El hombre de la rata es uno de los monólogos más representativos y representados de su autor. La pérdida de la humanidad en un mundo violento, injusto y corrupto, es el argumento básico de un soliloquio de víctima y victimario. La gura de un sistema político y social que degenera en un roedor incontenible de los valores humanos, se descifra a través del encuentro del hombre con sus semejantes espectadores. La obra es una confesión y una comunión con la esencia del hombre que aún perdura en la actual civilización signada por el terror y las guerras. Esta pieza es un texto muy divertido, pero que ausculta en las profundidades políticas y sociales de una sociedad.
¿Ha adaptado o versionado el texto?
No, la pieza conserva su entera vitalidad dramatúrgica y conceptual. El año 1991 en compañía de Costa Palamides nos reunimos con Gilberto Pinto y  conversamos acerca de adecuar algunos términos que por situaciones históricas considerábamos debían actualizarse. Él estuvo de acuerdo y realizó los ajustes necesarios.
¿Cuándo y dónde fue el estreno?
 Este reciente montaje lo estrenamos el mes de noviembre del año 2017 en el Festival Comunitario de Barinas en el Teatro Orlando Araujo. Luego, dos días después fuimos al Festival de Occidente en la ciudad de Guanare.
¿Qué planes tiene con este montaje?
 Los planes son realizar funciones en Caracas y en el interior de la República. Del mismo modo, nos encantaría   hacer funciones en la comunidad latinoamericana. En todo este tiempo he estado trabajando en cine, del mismo modo haciendo teatro con los colegas del Ministerio de Educación.  En el campo académico terminé una maestría en currículo y un doctorado en Patrimonio Cultural. Esencialmente, yo me defino como un promotor cultural.
¿Desde cuándo está  en estos avatares del teatro?
 Desde el año 1974, cuando estaba en la Isla de Margarita y decidí asistir a unas clases de teatro y títeres que daban en el Complejo Cultural Modesta Bor en Porlamar. Luego, allí llegó el dramaturgo Néstor Caballero como docente en teatro y luego Freddy Pereyra. Empezamos a ensayar La historia del zoológico de Edward Albee. Luego nos vinimos a Caracas con ese montaje e hicimos una gira nacional. Luego en teatro, trabajé con Rodolfo Santana, Néstor Caballero, José León, Carlos Sánchez, Carlos Miranda, Diego Sadot, Luego vino el cine: Clemente de la Cerda, Luis Alberto Lamata, Oscar Lucien, Stelvio Massi, Vittorio Sindoni, Carlos Rebolledo, Thaelman Urguelles, entre otros. Esta pasión por el teatro y la actuación es una tarea que la sumo con sumo pasión y locura en el buen sentido de la palabra.



HEMINGWAY OTRA VEZ EN CARACAS

$
0
0
Ernest Hemingway

¿Cuáles son la vasos comunicantes culturales y existenciales entre el contemporáneo teatrero venezolano José Tomás Angola Heredia con el bardo místico inglés John Donne (1572/1631) y el novelista estadounidense Ernest Hemingway (Oak Park, 1899/ Ketchum, 1961)?
¿Por qué se suicida el gringo aquel si aparentemente lo poseía todo? ¿Tenía miedo a vivir o a seguir luchando para escribir más obras famosas por su calidad literaria? ¿Vale la pena vivir a pesar de los obstáculos sociales y políticos? ¿Para qué vivir si debes renunciar a tus afectos o tus placeres? ¿Para qué vivir hasta envejecer acosado por las enfermedades o las desilusiones que proporcionan los seres amados?
Las   respuestas las descubrirá o las deducirá el teatromaníaco que en Caracas acuda a la sala Alexander Humboldt, en la calle Juan Germán Roscio, en San Bernandino, donde precisamente hace una breve temporada de reposición –la estrenaron durante el pasado mes de enero- el excelente espectáculo Ningún hombre es una isla, escrito, dirigido y además protagonizado por Angola Heredia (Caracas, 1967), apuntalado en los correctos actores Andrea Miartus y José Manuel Vieira. Las presentaciones están pautadas para los días 15 y 16, 22 y 23 de este septiembre, a las 4PM.
Solamente en un espacio escénico como el de Humboldt podía Angola Heredia hacer y lucir lo logrado. Un estremecedor homenaje al ya legendario Hemingway durante el último año de su vida, por intermedio de un bien caracterizado y exhaustivo monologo existencial del célebre intelectual, con los precisos y convincente soportes de Miartus y Vieira y la magia audiovisual que le proporcionó la correcta utilización de las técnicas del mapping y el videobean para ambientar la larga y exhaustiva, además de patética, despedida del autor de Por quién doblan las campanas y otras novelas.
NINGUN HOMBRE ES UNA ISLA
Angola Heredia revisa con su texto la poesía y la filosofía de Donne, en especial su poema Ningún hombre es una isla, que es una amarga meditacion sobre los seres humanos y circunstancias existenciales en las sociedades que les ha correspondido vivir, concretamente, como lo canta en su poema, ningún hombre es una isla entera por sí mismo. Cada hombre es una pieza del continente, una parte del todo. Si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia. Ninguna persona es una isla; la muerte de cualquiera me afecta, porque me encuentro unido a toda la humanidad; por eso, nunca preguntes por quién doblan las campanas; doblan por ti”.
El aburrimiento y desencanto existencial de Hemingway, agravado por su dependencia alcohólica  se materializa en la escena gracias al encuentro mágico entre el escritor y los protagonistas de su novela Por quién doblan las campanas, lo cual permite ponderar el escritor en charlas con  Robert Jordan y su enamorada María, y avanzar hacia su final: el suicidio, utilizando  una de sus famosa escopetas de cazador, después de haber sido obligado a salir de Cuba por la llegada de la revolución de Fidel Castro y sus guerrilleros de la Sierra Maestra.
Es estremecedor presenciar como Hemingway se desencanta de su vida opulenta y triunfadora en medio de esa soledad acompañada en que vivía y se presencia como se inmola sin dar mayores explicaciones, aunque deja interrogantes sobre su vida sentimental, a pesar de que tenía una esposa aparentemente   enamorada.
 Angola Heredia evoca y materializa a Hemingway porque su figura siempre le cautivó por su vida tan intensa, desafiante y titánica. “Construyó en sí mismo, su mejor personaje. Pero si nos adentramos en sus libros sorprendería la sensibilidad y la delicadeza de su prosa y sus personajes. Algo entonces parece no cuadrar. ¿Quién era en verdad este hombre más grande que la vida que cazaba leones y pescaba grandes agujas, asistía como corresponsal de prensa a todos los frentes de batalla de su tiempo, boxeaba con quien fuera y bebía centenares de botellas de whisky?, ¿el que reflejaban los periódicos de entonces o el que subyace en sus obras?  Él mismo se idealizaba y se volvía Frederick Henry, el soldado iluso de Adiós a las armas, o Jake Barnes, el periodista impotente por una herida de guerra, de Fiesta, o Harry Morgan, el cínico pescador y contrabandista con mala suerte, de Tener y no tener. Y por supuesto Robert Jordan, quizá su alter ego más genuino, el profesor norteamericano que se involucra en la guerra civil española, de Por quién doblan las campanas”.
Angola Heredia, como lo ha dicho, escribió, dirigió y protagonizó Ningún hombre es una isla porque esos conflictos existenciales son profundamente atractivos para cualquier argumento teatral. “Hemingway luchó toda su vida para demostrar que era un tipo duro, viril, cínico, cuando en realidad se sentía frágil, débil y sensible. Ese ruido, esa incongruencia emocional, junto con los impulsos autodestructivos debieron ser muy tormentosos. Él es una metáfora maravillosa sobre la ficción literaria. Una oportunidad estupenda para explorar temas que me interesan mucho: la creación como acto de lucha contra el determinismo de la vida, la muerte como final angustiante e inevitable, el amor como único aliento existencial”.
90 minutos
El espectáculo, que no dura más de 90 minutos de duración, permite que el espectador reflexione sobre los momentos que momentos tan tenebrosos que vivió el protagonista, que, como dice Angola Heredia, lo único que parece tenerlo en pie es la esperanza de salir de esta pesadilla, ya que “el mismo Hemingway elabora en todas sus obras una serie de ideas que bien podrían ser aplicadas para nuestro tiempo y realidad y que trato de rescatar para la pieza. Él mismo las resumió: El mundo es un hermoso lugar, vale la pena defenderlo y detesto dejarlo, el hombre no está hecho para la derrota; un hombre puede ser destruido pero no derrotado, jamás piensen que una guerra, por necesaria o justificada que parezca, deja de ser un crimen, y el hombre que ha empezado a vivir seriamente por dentro, empieza a vivir más sencillamente por fuera”. Es, pues, un intenso y serio hecho teatral, artísticamente bien logrado y donde la música es la salsa o el cemento para amalgamar las acciones y los verdades de los diálogos de un texto que solamente un periodista-dramaturgo podía ser capaz de pergeñar. Este montaje, finamente realizado, con tres actores y una tecnología poco utilizada por los demás teatristas criollos, nos recuerda que el teatro todavía es una valiosa   reflexión sobre la razón o la sinrazón de la vida misma, a pesar de las más difíciles circunstancias, porque nunca no se puede dejar de soñar o de amar o al menos anhelar encontrarse con el ser amado, salvo que se quiera huir de la vida por la fácil puerta infinita del suicidio, tras dejarse vencer por el temible desencanto


EL TEATRERO VENEZOLANO MÁS FAMOSO DE NUEVA YORK

$
0
0
FERNANDO THEN
 Fernando Then vive en Nueva York. No revela la edad porque no lo necesita, pero todos los demás congéneres lo buscan porque tiene cierto poder en el mundo teatral latino o hispano. Pero dejemos que sus respuestas revelen lo que hace y lo que piensa, además de cómo ha sido su lucha.
¿Cuantos años en NY?
Ya tengo15 años en NY, llegue en el 2003
¿Cuantos años en Repertorio?
Igual 15 años, trabajando para Repertorio Español, tuve la suerte de entrar primero como actor, en La Fiesta del Chivo, haciendo el papel de Joaquín Balaguer, la obra fue dirigida por Jorge Ali Triana, esta obra se mantuvo en cartelera 10 años. Tú, Moreno-Uribe la pudiste reseñar.
¿Repetiría esa experiencia de emigrar?
Aunque cuando leo tu pregunta se me paran los pelos, la respuesta es SI definitivamente, es algo de lo que estaré orgulloso toda mi vida. Salí de Venezuela empujado por una fuerza extraña, tuve una especie de revelación, pude ver el futuro de mi país y algo dentro de mí me dijo vete, "vas a ser más útil fuera que dentro". Y realmente ha sido así. Si la vida vuelve a plantearme repetir la experiencia de emigrar lo haría sin duda alguna. El hombre a veces necesita salir fuera de su área de confort y poner a prueba su capacidad y para lo que se preparado en la vida.
¿Cómo puede resumir esa experiencia?
Emigrar es una experiencia que todos deberíamos experimentar alguna vez en la vida. :"Aunque claro, no es para todos". La vida te reta, te empuja y te hace más fuerte, separarte de tus lazos familiares, amigos , costumbres, hasta la comida te hacen falta, pero cuando te das cuenta que esos lazos después de 15 años  se mantienen igual o  más fuertes y a eso le sumas que en tu  vida has encontrado , nuevos amigos, campaneros de trabajo y creas vínculos afectivos con nuevas personas, te das cuenta que has ganado un mundo, una vida más grande y plena a la que tenías antes, se han sumado cosas a la vida, y como siempre he dicho " Yo no vine a New York para empezar de cero, vine a continuar mi vida, con todo lo que traje de Venezuela, con lo que mi país me regaló y enseñó. Aquí he recordado que cuando era niño en el colegio donde estudie primaria, todos los días nos daban un vaso de leche (1967 Grupo Escolar Francisco Pimentel) y así muchas más cosas que nunca tendré como agradecer. Todo eso vino dentro de mi maleta, los mejores recuerdos y la mejor formación que te puede brindar una familia y un país maravilloso como el nuestro. Estas fueron mis armas para continuar mi vida en los Estados Unidos. Aunque no pude escapar de trabajar en restaurantes como mesonero, repartidor de comida y lavaplatos, ese trabajo me dignificó, me hizo sentir orgulloso de ser valiente, para mí, cada día era un nuevo personaje, el mesonero, el repartidor de comida, o el lavaplatos, eran los personajes que la vida me está poniendo a interpretar y tenía que ser el mejor, Tengo anécdotas de ancianos que pedían comida al restaurante donde trabajaba para compartirla conmigo, esos ancianos recibieron la calidez que tenemos nosotros los Venezolanos a través de mi persona (ojo y sin proponérmelo). Este mundo del restaurante duro solo tres meses, fue el taller de actuación más intenso que he realizado y la vida me regaló la oportunidad de volver a un escenario, la vida nos devuelve a donde pertenecemos, es una ley que no se puede evitar. 
¿Cree que ha crecido en lo profesional y qué le falta algo todavía?
Claro que he crecido mucho profesionalmente, más de lo que pude imaginar, llegar a una compañía en New York y encontrarme con dos genios del teatro fue la mejor bienvenida que me pudieran dar, me recibieron: Gilberto Zaldívar y Rene Buch, yo he tenido mucha suerte siempre, la vida hace que me rodee de los mejores, en mis principios tuve los mejores maestros, desde la Escuela  Juana Sujo (Franklin Tovar, Gilberto Pinto, Paul Williams) fuera de ella: Carlos Giménez, Ibrahim Guerra, Rodolfo Santana, nombro los más íntimos de mis principios hay muchos más a los que les debo todo lo que soy hoy en día. Aquí he tenido la oportunidad de expresarme como actor, asistente de dirección, diseñador de vestuario y director, aunque mi cargo en Repertorio es el de Gerente de Producción, alterno con las otras facetas en las diferentes producciones, Repertorio tiene 16 obras en su programación, funciones de lunes a viernes para los estudiantes y los fines de semana la programación regular, esto sin contar las giras fuera de la ciudad, Repertorio hace al ano aproximadamente unas 360 funciones. Todavía me falta mucho que aprender y aportar a este teatro que recién cumplió 50 años, Cuando pienso en mis maestros: Carlos Giménez, Gisela Pérez Guzmán y muchos más, siento que aún estoy en pañales y que me queda mucho por aprender todavía. El crecimiento lo puedo comprobar pues en estos 15 años he recibido tres premios ACE y cuatro premios HOLA. 
¿Cómo le han tratado los gringos y los latinos?
Los americanos para mi han sido personas muy receptivas y me han tratado con respeto, tengo muy buenos amigos que no hablan español y con los cuales puedo compartir cualquier tema. Con los latinos la cosa es diferente, es como si siempre estuvieran recordando en mi país yo era tal cosas, yo tenía tanto y es como si no pudieran desconectar el Spice: yo era, esto me distancia un poco  (claro no todos) .Tengo un gran grupo de amigos de todas partes: argentinos, cubanos., mexicanos y es gente maravillosa y muy valiosa,  pero cuando me encuentro con alguno que me dice "yo era abogado en mi  país", le digo usted es abogado, que no pueda ejercer aquí es otra cosa!!!
¿Cómo se han comportado los venezolanos?
Mis venezolanos…somos gente maravillosa, pero muy raros, no sé cuánto daño nos ha hecho el que nos metieran en la cabeza que Venezuela es un país rico y que los venezolanos somos ricos. Pienso que esto nos ha perjudicado al momento de valorarnos y ser más humildes; en los últimos años ha llegado gente muy trabajadora y con ganas de echar pa´lante, pero también tengo que decir que no todo es oro. Pero mi círculo inmediato de afecto son mis amigos venezolanos, con quien paso las fechas importantes.¿Qué ha pasado con su familia en Venezuela?
Mi familia sigue en Venezuela, mi madre, hermanas y primos. Yo he intentado que salgan de Venezuela por un tiempo, mientras las cosas se recuperan, pero me dicen: Y si nos vamos todos, ¿quién va a defender lo que es nuestro? 
¿Qué pasa con Repertorio en sus 50 años?
Cincuenta años de teatro no es una cosa fácil, vengo de un mundo de grupo teatral, de compañías estables como Rajatabla. Pero Repertorio es algo especial, primero se encuentra en la capital del mundo. Reúne actores de todas partes de Latinoamérica y España. La programación va desde teatro clásico, dramas, comedias, musicales, zarzuela y flamenco. Estos son algunos de los géneros teatrales que ha llevado a Repertorio a posicionarse como la compañía de teatro de mayor importancia de habla hispana en Estados Unidos. Sin olvidar que su misión como institución es promover y divulgar nuestra lengua. Creo que ofrecer todo esto a una ciudad como New York es un aporte de gran valor, y más ahora que la inmigración hispana crece cada día.
¿Qué futuro se vislumbra?
Pienso que después de dirigir la pieza El Crédito, la dirección es algo que me esta apasionando cada día más para incursionar en el mundo de la representación de actores.

Viewing all 1437 articles
Browse latest View live